La última curva de la cuesta Caracoles de Tomé es la que está causando inconvenientes a los buses que circulan por el sector, el último involucrado fue uno de la empresa Línea Azul, que quedó detenido en la curva al no poder virar, causando gran congestión vehicular.
Son al menos tres los incidentes registrados en las últimas semanas. Desde la Municipalidad de Tomé atribuyen lo ocurrido a la inexperiencia de los conductores.
Sin embargo, para las máquinas de Eme Bus, empresa que ha tenido problemas en dos oportunidades, lo descartan, incluso a través de Twitter solicitaron remover las contenciones de concreto ubicadas en el costado derecho, recordó Felipe Muñoz, jefe operacional de la empresa.
El capitán Oliver Urrea, de la Primera Comisaría de Carabineros de Tomé, destacó que el problema es de diseño y llaman a los conductores de grandes buses a la precaución.
Es un camino con curvas peligrosas y en el municipio están solicitando que se realice un estudio de prefactibilidad, lo que permitiría contar con una ruta alternativa para acceder a la comuna.
Así lo informó la alcaldesa subrogante de la comuna, Marisa Maquiavelo, quien agregó que además plantearon el tema al ministro de Vivienda y Urbanismo.
En tanto, en marzo se reunieran con autoridades locales para insistir con la necesidad de contar con una ruta alternativa para ingresar a Tomé.
