Casi cinco años va a cumplir el caso Santa Bárbara en espera de que la Corte de Apelaciones de Concepción revise el fallo por la desaparición de 28 campesinos en 1973.
Se trata de la más antigua causa del tribunal de alzada, cuyo trámite ha sido retrasado tanto por los propios ministros como los condenados.
En esta investigación, fueron condenados 17 exuniformados y civiles por el secuestro calificado de los campesinos de Santa Barbara y Quilaco, desaparecidos en 1973.
La sentencia es de 2013 y las apelaciones de las defensas presentadas al año siguiente, desde cuando los familiares de las víctimas esperan el fallo de segunda instancia.
Sin embargo, con distintos argumentos, la vista de la causa se ha retrasado ya por cinco años, ahora con el cambio de abogado de unos de los condenados, lo que fue calificado como un escándalo por la vocera de la agrupación de familiares de detenidos desaparecidos, Norma Panés.
Y en eso coincidió uno de los abogados querellantes, Patricio Robles, quien calificó como una maniobra dilatoria la utilizada por uno de los condenados, Sergio Fuentes Valenzuela, quien debería estar ya cumpliendo una pena de 10 años de cárcel según las víctimas.
Pero lo más grave es que al suspender la vista de los recursos la Corte de Apelaciones saca la causa de la posibilidad de trámite, lo que podría evitarse, explicó el dirigente del Colegio de Abogados, Ignacio Sapiaín, precisando que mientras asume una nueva defensa los alegatos pueden mantenerse en espera.
Intentamos consultar tanto a la Corte de Apelaciones como a la Suprema por el caso Santa Bárbara, sin existir hasta el cierre de esta nota un pronunciamiento respecto de un tema tan sensible y donde las víctimas esperan que se haga justicia desde hace más de 45 años.