El excanciller del Arzobispado de Santiago, Óscar Muñoz Toledo, fue formalizado la mañana de este viernes por los delitos de abusos contra menores y estupro, en el Tribunal de Garantía de Rancagua, región de O’Higgins. Tras ello, fue enviado a prisión preventiva.

El fiscal regional Emiliano Arias fue quien expuso los argumentos y detalló los antecedentes del caso. Leyó cinco testimonios, entre ellos, algunos de familiares. Luego pidió la medida cautelar de mayor intensidad, la que fue acogida por el tribunal sin oposición de la defensa.

Por ello, el imputado será enviado al módulo 1 de la cárcel de Rancagua, mientras que el plazo de la investigación se fijó en 180 días.

En el exterior del recinto hubo manifestantes, quienes pidieron el máximo rigor de la ley para el religioso.

Tras la audiencia, el fiscal Arias explicó que hay factores en común en relación a las víctimas: menores de edad, inexperiencia sexual, atacadas y confianza que generó el imputado.

“También observamos una clara manipulación sicológica. Abusos se conciencia en relación a las víctimas”, manifestó.

Con respecto a una pena probable, detalló que es un mínimo de 5 años y un día, además, si se considera el estupro, podría llegar a los 15 años.

En la misma línea, Arias detalló que, por su rol en la Iglesia, Muñoz Toledo conocía cómo funcionaba el sistema de investigaciones por delitos en contra de menores. “Él conoce qué hacer, cómo manejarse y asegurar su impunidad”, manifestó.

Defensa del religioso

Gabriel Henríquez, defensor del imputado, aseguró que su representado está tranquilo, ya que sabían que en algún momento debían enfrentar esta situación. “Vamos a colaborar en todo lo que sea necesario”, manifestó, añadiendo que está conmocionado.

Con respecto a los relatos expuestos, el jurista indicó que es evidente que recién están tomando conocimiento de algunas acusaciones, por lo que en su debido momento podrán apartar. “Dos de los hechos encuadran en la autodenuncia. Los otros tres son nuevos”, dijo.

Pese a que no se opuso a la medida cautelar, Henríquez afirmó que pronto pedirán una revisión de ella, cuando reúna todos los antecedentes.

Muñoz Toledo fue arrestado ayer jueves y fue trasladado a dependencias del OS9 de Carabineros en la comuna de Macul, al materializarse una orden.

El sacerdote de 56 años, quien se autodenunció a finales de mayo, enfrenta acusaciones por 7 presuntos casos de abuso sexual, algunos contra miembros de su propia familia.

Valora investigación

José Andrés Murillo, director Ejecutivo de la Fundación para la Confianza y una de las víctimas de Fernando Karadima, valoró que Fiscalía esté liderando la investigación. “No es problema canónico o pastoral, es de interés público”, advirtió.

Asimismo, indicó que no sólo la Iglesia debe hacerse responsable de los hechos, sino que también responder por el daño cometido. “No sólo es un problema penal, sino ético. Los que no han estado a la altura tienen que renunciar, tienen que aceptarle la renuncia”, dijo.

Con respecto a la investigación, estimó que “es importante saber qué información tenía el arzobispo, los cardenales, porque trabajó junto con ellos”.