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Resumen generado con una herramienta de Inteligencia Artificial desarrollada por BioBioChile y revisado por el autor de este artículo.

Investigadores de la UACh desarrollan un sistema con inteligencia artificial para la elaboración de mapas de ruido en Valdivia, región de Los Ríos.

Investigadores de la Universidad Austral de Chile (UACh), desarrollan un sistema con inteligencia artificial para elaborar mapas de ruido y apoyar la futura norma ambiental de Valdivia, región de Los Ríos.

La iniciativa, desarrollada por el Laboratorio de Acústica Ambiental del Instituto de Acústica de la UACh, en colaboración con el Ministerio del Medio Ambiente, utiliza redes neuronales profundas que combinan análisis de audio y video, para caracterizar vehículos y sus niveles de emisión sonora.

Dicha tecnología permitirá obtener diagnósticos más precisos, rápidos y económicos que los métodos tradicionales, que dependen de conteos manuales o sensores no estandarizados.

El director del proyecto, doctor Enrique Suárez, explicó que el tránsito vehicular es la principal fuente de ruido en las ciudades, un factor reconocido por la Organización Mundial de la Salud como un riesgo, asociado a alteraciones del sueño, estrés, irritabilidad y enfermedades cardiovasculares.

A su vez, el académico señaló que el sistema FUSA ROADS apunta precisamente a resolver la brecha de generar datos estandarizados y automatizados que faciliten la elaboración de mapas de ruido y la selección de puntos de monitoreo ambiental.

Además, aclaró que esta herramienta permitirá actualizar diagnósticos acústicos en distintas ciudades y fortalecer la toma de decisiones del Ministerio del Medio Ambiente en esta materia, esto por medio de la creación de una norma primaria de calidad ambiental del ruido.

En ese sentido, Suárez añadió que el prototipo ya funciona y que su proyección no es solo nacional, sino también internacional, considerando el trabajo conjunto con expertos de España y Francia.

En paralelo, el proyecto está actualizando el mapa de ruido de Valdivia, el cual no era revisado desde hace una década, detectando valores sobre los 65 decibeles en zonas de alto flujo, especialmente donde circula transporte público y vehículos de mayor tamaño.

La iniciativa contempla dos años de ejecución y actualmente se encuentra en su primera etapa, con tres sensores instalados en Valdivia y más de 50 puntos medidos en terreno.

Finalmente, para enero se proyecta una campaña de levantamiento de datos en Santiago, lo que permitirá validar el sistema en una ciudad de mayor escala.