Por medio de un comunicado, exalumnos del colegio donde ocurrió un caso de violación, dieron a conocer su total descontento por el actuar del establecimiento de Castro y acusaron que como institución educacional no cumplieron con los protocolos establecidos para estos casos.

Esta situación se produjo luego que el pasado jueves, dos jóvenes fueron condenados por violación continua contra un menor de edad, al interior del recinto en la provincia de Chiloé.

En el comunicado describen su repudio contra la situación y afirman que la víctima es un alumno que se relacionaba con la comunidad y a quien se le recuerda con mucho afecto por sus pares, lo que “hace más dolorosa la situación”.

Los exalumnos también indicaron que sus pensamientos están con la familia de la víctima, quienes “tras años de espera hoy pueden encontrar un poco de justicia con la sentencia condenatoria dictada por el Tribunal Oral en lo Penal de Castro de forma unánime”.

Dentro del escrito, los antiguos alumnos del establecimiento educacional también describieron cómo era el funcionamiento interno. Aseguraron que “les gusta mantener una comunidad entre la dirección, estudiantes, apoderados, profesores y otros funcionarios, con quienes llegan a relacionarse en distintas dinámicas que exceden muchas veces el salón de clases, lo que permitió que se germine una sensación de familiaridad en sus muros”.

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Entonces, ¿cómo es posible que una violación reiterada en tiempo, como fue acreditado en tribunales, pasara desapercibida por toda la “familia” que sostiene esta comunidad?
- Exalumnos

Además, acusaron que el colegio de Castro “no se enteró recientemente de los abusos, ni tampoco hizo la denuncia al Ministerio Público, como se esperaría de un establecimiento educacional verdaderamente preocupado de sus alumnos y a quienes educa”.

Los jóvenes condenados fueron compañeros de la víctima y habrían cometido estos delitos entre el 2016 y 2017. En septiembre de este último año, la madre del menor interpuso la denuncia.

También aseguraron que “la dirección del colegio ayudó directamente a construir la defensa de los imputados, pues se escucha por todas partes, que los condenados como violadores, fueron catalogados por ustedes, como “alumnos modelos”.

“Sin embargo lo que más nos duele es que el colegio en vez de asistir a la víctima, le castigaran, aislándolo de sus propios compañeros y protegieron a sus victimarios, siendo indiferentes al dolor de un adolescente que vivió una traumática y horrible experiencia”, finalizaron en su comunicado.

Según quienes escribieron el comunicado, el colegio que indicaba tener los índices de bullying más bajos en la región, hoy se ve involucrado y cuestionado por la negligencia en seguir los protocolos establecidos.

Los ex lumnos que se vieron representados en esta carta finalizaron el escrito pidiendo a la institución educacional una disculpa pública por lo sucedido.