La reunión de los obispos en Roma con el papa Francisco generó conmoción en la comunidad católica de Osorno, donde la salida de Juan Barros desde la Diócesis local se da por hecho, sin embargo, las relaciones entre fieles cristianos y laicos reaparece ahora como foco de conflicto.

Como informó Radio Bío Bío, lo anterior partió por el exhorto que realizó el párroco de la catedral San Mateo, Bernardo Wert, a los laicos organizados para que pidan disculpas por el “sufrimiento” que causaron a la Iglesia quienes se manifestaron por la salida de Barros.

Desde el movimiento de Fieles Cristianos Católicos, a través de uno de sus voceros, Jose Manuel Rosas, afirmó que bastó ese llamado para que incluso a través de redes sociales reaccionaran de manera violenta por parte de quienes no aceptan el emplazamiento.

Para Jose Manuel Rosas, terminar con las asperezas requiere de una voz clara desde el Vaticano mediante un acto resolutivo sobre la situación del obispo de Osorno y también definir con claridad las intenciones que hay tras el Movimiento de Laicos, que según él, de unidad por ahora nada promueve.