El 5 de febrero se dio a conocer el homicidio de dos comuneros mapuche al interior una comunidad de la localidad de Pidima, en la comuna de Ercilla, en la región de La Araucanía. Tras las indagatorias, se logró esclarecer que los dos hombres recibieron municiones de guerra, disparadas por un fusil.

El antecedente fue entregado por el fiscal de la Fiscalía de Alta Complejidad, Felipe González.

Esto luego que la Corte de Apelaciones de Temuco, confirmara la medida cautelar de prisión preventiva que el Juzgado de Garantía de Collipulli, aplicó al comunero mapuche, de iniciales F. M. M.

El imputado es investigado por el homicidio de los también comuneros Jorge Marimán Loncomilla y Matías Cariqueo Loncomilla a comienzos de este mes.

El hecho de sangre quedó al descubierto al interior de la comunidad Boyen Mapu de la localidad de Pidima, cuando el imputado se contactó con Carabineros para informar de la muerte de dos personas, en legítima defensa.

Sin embargo esto fue descartado por la Fiscalía, ya que según la investigación el imputado dio muerte a Jorge Marimán Loncomilla y Matías Cariqueo Loncomilla, hasta ese momento con una escopeta que tenía encargo por robo y debido a rencillas anteriores.

El fiscal precisó que si bien el imputado entregó la escopeta con la que supuestamente disparó para defenderse.

Pero tras los peritajes de rigor se estableció que ambos comuneros murieron, tras ser impactados por balas de guerra calibre 5.56 disparadas por un fusil.

F. M. M., está formalizado además de porte ilegal de armas de fuego, porte ilegal de munición y receptación de arma de fuego, ya que una escopeta que el mismo entregó, aseverando que la usó en el doble crimen, tenía encargo por robo en Victoria desde 2013.

Con la resolución, el tribunal de alzada desestimó la teoría de la legítima defensa, planteada por el imputado.