La crisis que viven los productores de la uva flame seedless, más conocida como “sin pepa”, en la región de Coquimbo, ha generado desempleo y preocupación en muchos de los afectados por los malos resultados del negocio.

En específico, la situación se ha traducido en un 18% de cesantía en las comunas de Monte Patria y Vicuña, todo por los altos precios internacionales del producto, cerca de 6 dólares el kilo.

En las comunas mencionadas, la crisis mantiene en la actualidad a 3.232 personas sin trabajo.

A lo anterior, además, se sumó el hecho que las cajas embarcadas durante enero de 2018 para exportación arrojaron cifras negativas, no alcanzando a cubrir los costos operacionales, tras dos temporadas consecutivas de malos retornos, transformándose en un negocio inviable e insostenible en el tiempo.

Debido a los malos resultados, esta especie se ha convertido en una variedad que no es competitiva en el mercado, afectando principalmente a pequeños productores, quienes poseen el 90% de este fruto.

Por ese motivo, este jueves, los afectados pedirán formalmente a las autoridades medidas paliativas, entre las que destacaría la declaración de algún elemento que tenga el Estado para no perder la producción de este año.