Con el objetivo de evitar intentos de fuga, ataques armados y una vulneración de la seguridad en general, Gendarmería compró tres vehículos blindados por un monto superior a los $640 millones. Lo anterior ha generado críticas a raíz de lo que acusan como el pago de un alto sobreprecio.

Argumentando la llegada de la criminalidad organizada transnacional a nuestro país, Gendarmería concretó -por trato directo- la compra de tres autos blindados por un monto total -considerando el IVA- de 640.500.000 millones de pesos.

Lo anterior, para enfrentar el alto poder económico y de fuego de las organizaciones de carácter delictual. En cuanto al trato directo, desde la institución respondieron que responde a especificaciones técnicas y detalles tácticos.

“Así como la tecnología y las características específicas de los vehículos blindados, deben ser catalogadas como información delicada y confidencial”, agregan.

Por lo que, considerando esas razones que ya fueron ponderadas por la Dipres, “el trato directo resulta ser la vía idónea para resolver con la mayor urgencia y reserva posible la compra”.

Lo anterior, permitiendo “contratar con un proveedor determinado, sin la concurrencia de los requisitos de una licitación pública, fundamentado en las causales expresamente indicadas en el artículo 8° de la Ley de Compras y en el artículo 10 de su Reglamento”.

Los argumentos de Gendarmería y acusación de alto sobreprecio

Según una resolución exenta, a la que tuvo acceso BBCL, desde Gendarmería se justificó la compra considerando una adecuación de los protocolos de seguridad.

Lo anterior, especialmente en lo que respecta al traslado de imputados a audiencias o traslados a otras unidades penales a nivel nacional, desplazamientos que en su mayoría son por vía terrestre.

Dichas intervenciones, dice el documento, han ido en aumento y por lo mismo se ha requerido la implementación de equipamiento de última generación para evitar hechos que pongan en riesgo la seguridad de los imputados, de personas privadas de libertad, de personal institucional y/o de la comunidad en general.

De hecho, se nombran bandas como el Tren de Aragua de Venezuela, “en cualquiera de sus facciones a lo largo del país”; las bandas colombianas “Los Chotas” o “Los Espartanos” y la banda peruana “Los Pulpos”.

Una fuente que conoce la industria -y que pidió reserva al ser pequeño el mercado-, luego de analizar la resolución exenta, comenta que es extraño que Gendarmería no realizara una investigación más profunda de las distintas opciones de blindaje.

Igualmente -agrega- tampoco se consideraron antecedentes de las distintas empresas que actualmente ofrecen estos servicios en Chile, que son más de 4 ó 5. De esta manera, se pudo realizar una licitación publica para que distintos oferentes pudieran participar.

Esto porque, la misma fuente antes mencionada, asegura que al realizar cotizaciones respectivas con empresas brindadoras en Chile y/o en el extranjero, “la institución podría haberse ahorrado un % no despreciable en el valor del blindaje”.

Igualmente, complementa que en la adjudicación no queda claro qué norma deben cumplir las unidades y tampoco se profundiza en las certificaciones de los materiales a utilizar.

A esto se suma que tampoco se solicita que los materiales tengan certificación del IDIC o entrega de probetas a la misma institución de Gendarmería para realizar pruebas balísticas internas.

Características de los vehículos blindados por más de $640 millones

Lo descrito anteriormente busca evitar vulneración de la seguridad y una fuga, un ataque armado para neutralizar informantes o el intento de muerte de bandas rivales.

Por lo que, argumenta la institución, “resulta evidente e impostergable la necesidad de adquirir, a la mayor brevedad, los mencionados vehículos blindados, compra que adquiere el carácter de esencial”.

En cuanto a las características, se trata de 3 vehículos marca Chevrolet Suburban LT 4×4 del presente año 2024. Estos consideran un blindaje de cabina en los 360 grados: piso, laterales, techo y compartimientos.

Se estima que cada blindado sea utilizado para el traslado de personal y personas privadas de libertad. En total, 6 pasajeros o superior; 2 internos o superior y 4 funcionarios.

Finalmente, desde Gendarmería agregaron que “la orden de compra fue emitida el 28 de marzo de 2024” y los vehículos están en proceso de confección, por lo que aún no han sido entregados.