El juicio contra el exjefe militar de los serbios de Bosnia, Ratko Mladic, apodado el “Carnicero de los Balcanes”, entró este lunes en la etapa final con el inicio de la requisitoria del fiscal, que durará tres días.

El Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (TPIY) acusa a Mladic, de 74 años, de haber emprendido la “limpieza étnica” de una parte de Bosnia, con la intención de crear un Estado serbio étnicamente puro.

El acusado afronta 11 cargos de genocidio, crímenes contra la humanidad y presuntos crímenes de guerra cometidos durante la guerra de Bosnia (1992-1995), que causó más de 100.000 muertos y 2,2 millones de desplazados.

Al final del juicio iniciado en 2012, el fiscal aseguró que Mladic estaba al mando y “se había atribuido el mérito” de un plan estratégico que “había alterado de forma radical la imagen demográfica de las zonas de Bosnia reivindicadas por los serbobosnios”.

“Lo que ocurrió de municipio en municipio no era un efecto accidental de la campaña militar, sino su objetivo”, declaró el fiscal Alan Tieger ante el tribuna de La Haye.

Limpieza étnica

Mladic vestía un traje gris y una corbata con estampados blancos y azules. Con aire sombrío, miró largo rato a los periodistas y al público sentados en la sala, antes de apartar la vista para leer unos documentos.

Inculpado en julio de 1995, fue detenido en la casa de un familiar en Serbia el 26 de mayo de 2011, tras haber escapado durante 16 años a la justicia internacional.

El exjefe militar deberá rendir cuenta del sitio de Sarajevo, un asedio de 44 meses en el que murieron 10.000 civiles, víctimas de la artillería serbia o de los disparos de francotiradores.

Mladic también deberá responder por la masacre de casi 8.000 hombres y niños musulmanes perpetrada en julio de 1995 en Srebrenica, la peor matanza cometida en Europa tras la Segunda Guerra Mundial.

Sus abogados harán su alegato el viernes tras haber bombardeado a los jueces con más de 950 mociones durante el juicio para pedir, entre otras cosas, la anulación del proceso o la recusación de un juez.

Este lunes, los abogados defensores volvieron a presentar una demanda para aplazar la sentencia del TPIY, pero la corte rechazó esta moción, como la mayoría de las anteriores.

Mladic ‘llevaba la voz cantante’

Según la defensa, Mladic y sus hombres sólo se defendían ante los ataques de las fuerzas bosnias musulmanes, y el exjefe militar es víctima de un juicio “político”.

Pero Tieger acusa a los abogados de intentar “transformar a Mladic en un pequeño oficial incompetente, menos importante que los comandantes principales”.

El vídeo de una conversación entre los comandantes militares serbios difundido por la acusación demuestra “que mandaba, que llevaba la voz cantante”, según el fiscal, que afirmó que Mladic trata ahora de “eludir la responsabilidad de aquello de lo que se jactó”.

Los familiares de las víctimas aguardan con preocupación el final de este juicio, cuya sentencia se conocerá en el transcurso de 2017.

Munira Subasic, presidenta de la asociación de las madres de Srebrenica, espera que Mladic será condenado a cadena perpetua, mientras que su alter ego político, Radovan Karadzic, fue condenado a 40 años de cárcel.

El juicio contra Mladic es el último del TPIY, creado por la ONU durante la guerra en 1993 para llevar ante la justicia a los autores de las atrocidades cometidas durante los conflictos que asolaron la ex Yugoslavia.