Uno de los soldados norcoreanos capturados por Ucrania aseguró que sus oficiales le hicieron creer que combatía contra militares de Corea del Sur. Este llamativo hecho, sumado a otros que han sido reportados en las últimas semanas, dan luces sobre el manejo que Moscú y Pionyang han tenido por sobre los efectivos de Corea del Norte en la invasión en territorio ucraniano.
“Los funcionarios del Ministerio de Seguridad de Corea del Norte nos dijeron que los pilotos de los drones militares ucranianos son todos soldados surcoreanos”, señaló el efectivo en una entrevista con un medio local.
Identificado solamente con su apellido Ri, explicó que no sabía que iba a ser desplegado en Ucrania antes de ser enviado a la región rusa de Kursk, controlada parcialmente por el ejército ucraniano. A su vez, añadió que creía que había tropas surcoreanas en el terreno.
Junto con revelar que la mayoría de sus compañeros de batallón murieron por ataques ucranianos, el soldado dijo que su intención es irse a Corea del Sur una vez que sea liberado. Ser un “prisionero de guerra” es visto como una traición por el régimen de Kim Jong-un, por lo que regresar a su país supone un grave riesgo para él.
“Estoy seguro al 80% sobre mi futuro. Primero, solicitaré el estatus de refugiado en Corea del Sur. Si lo solicito, ¿me aceptarán?”, preguntó en la conversación. Finalmente, señaló que de haber tenido una granada, se habría inmolado antes de ser capturado.
En enero pasado, el servicio de inteligencia surcoreano (NIS) aseveró que Corea del Norte presiona a sus soldados desplegados en la guerra para que se suiciden antes que ser capturados por el enemigo.
En aquella oportunidad, el NIS indicó que el contingente norcoreano estaba sufriendo “bajas masivas” debido a su “falta de entendimiento de la guerra moderna”.
Asimismo, dijeron que los norcoreanos desplegados en el frente muestran su falta de preparación para conflictos modernos con actos “inútiles” como abrir fuego contra drones de largo alcance.
Luego de algunas semanas sin rastro, las tropas norcoreanas han regresado al campo de batalla en Kursk con nuevas estrategias, reduciendo el tamaño de sus unidades de combate e incorporando vehículos de misiles guiados antitanque Bulsae-4.
De acuerdo a Forbes, mientras antes los norcoreanos atacaban principalmente a pie en compañías de 100 o 200 soldados, ahora están lanzando asaltos en pelotones de 50.
Estos grupos de asalto más pequeños pueden ayudarlos a evitar la detección de los drones ucranianos así como mitigar las bajas masivas en caso de que los ucranianos los detecten.
En el campo de batalla han desarrollado hábitos singulares, como enviar a un soldado como señuelo cuando son sorprendidos por un dron para que así los demás lo puedan derribar. Los ucranianos han mencionado que los norcoreanos “disparan bien, se mueven bien, pero los utilizan como carne de cañón”.
En declaraciones recogidas por el The New York Times, el general Oleksandr Syrsky, máximo comandante militar de Ucrania, estimó que casi la mitad de los soldados norcoreanos habían resultado heridos o muertos. Pese a esto, advirtió que estaban “muy motivados, bien entrenados” y que eran “valientes”.
Soldados norcoreanos al servicio de Vladimir Putin
Fue el pasado 28 de octubre cuando después de días de especulaciones, Mark Rutte, secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), confirmó el envío de tropas norcoreanas a Kursk.
En aquella oportunidad, Rutte calificó el hecho como una “escalada significativa” del conflicto, afirmando que se trataba de una violación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU. Fue la primera vez que se comprobó la presencia de un ejército extranjero, no mercenarios, en la guerra.
Los reportes de diferentes gobiernos, incluyendo Estados Unidos, comenzaron a estimar la cantidad de soldados enviados por Kim al frente de combate. Mientras inicialmente se hablaba de 1.500, posteriormente la cifra llegó a los 12.000.
El 5 de diciembre entró en vigor el acuerdo de defensa mutua entre Rusia y Corea del Norte, el cual prevé la “asistencia militar mutua inmediata” en caso de un ataque a uno de los dos países.
Dicho tratado además compromete a ambas naciones a cooperar a nivel internacional para así enfrentar las sanciones occidentales y coordinar sus posiciones en las Naciones Unidas.
Alberto Villamarin, experto en geopolítica y estrategia militar, señaló a France 24 que esta alianza estratégica “tiene el sello de Chine”, recordando que Moscú y Pekín firmaron un pacto similar en los Juegos Olímpicos de Invierno 2022.
“La disrupción para este problema la tiene China, que es la que mueve los hilos y conoce exactamente cuáles son las debilidades y las fortalezas de Rusia. El día que China le retire la ayuda, Rusia se queda sin piso porque tiene a la OTAN y a Estados Unidos en contra”, manifestó el especialista.
Si bien China se ha mostrado públicamente como “neutro” en la guerra entre Rusia y Ucrania, ha sido acusada de suministrar armamento y material bélico al Kremlin.
“Mientras China juegue a esa presión de que está defendiendo la autonomía, la pluralidad y que el mundo sea multipolar, con el interés de socavar a Estados Unidos y de que Estados Unidos le ceda en el reclamo de Taiwán, ahí tendremos un problema por mucho tiempo que podría llegar inclusive a una guerra mayor”, dijo Villamarin.
¿Soldados norcoreanos en territorio ucraniano?
Una pregunta que muchos se hacen es si las tropas norcoreanas cruzarán la frontera para combatir en territorio ucraniano. Hasta ahora, se ha confirmado su presencia en la región rusa de Kursk.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha señalado que, en el futuro, podrían ser enviados por Rusia a otras áreas no especificadas de la línea del frente. No obstante, algunos expertos plantean las consecuencias que tendría el despliegue de estos efectivos en suelo ucraniano.
“Un avance a territorio de Ucrania protagonizado por tropas norcoreanas entrega incentivos para incrementar el apoyo hacia Kiev, tanto por Estados Unidos, como por Europa, y es posible que eso sea un principio calculado por parte de Rusia”, menciona al citado medio Guido Larson, académico de la Facultad de Gobierno de la Universidad del Desarrollo.
“Es decir, si autorizan la entrada norcoreana a Ucrania para la Federación rusa puede ser un riesgo y creo que Putin quiere evitar riesgos en esta etapa sensible del conflicto”, expresa.
Por su parte, hay quienes plantean la posibilidad de que soldados norcoreanos ya estén en Ucrania. “Uno de los temas de la guerra es guardar el secreto, pero lo más seguro es que ya hay especialistas y soldados trabajando en el Donbass y en otras partes”, dice Villamarin.
“Y van a morir o a caer capturados y se va a destapar el problema. Como pasó en la guerra de Corea, cuando China negaba la participación y capturaban soldados chinos en Corea”, puntualiza.