Una nuevo polémica rodea al presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, luego de que besara a una trabajadora durante un evento realizado junto a trabajadores expatriados en Corea del Sur, durante el último fin de semana.

De acuerdo al registro del momento, dos mujeres suben al estrado donde estaba Duterte, entonces el presidente le solicita a una de ellas un beso, la mujer responde que en la mejilla porque está casada, hasta que al final el mandatario filipino logra su objetivo.

“No lo tomen en serio. Es sólo por diversión, una artimaña” para divertir a las 3 mil personas que había en el lugar, señaló Duterte sobre la polémica, luego que la situación causara molestia en opositores y agrupaciones feministas, consignó diario El País de España.

La molestia contra Duterte no se sustenta sólo en este hecho, sino también en declaraciones anteriores del mandatario, como burlarse de la violación de una joven misionera australiana o cuando llamó a militares filipinos a disparar a la vagina de las militantes comunistas.

Aunque los seguidores del mandatario han dicho que el hecho fue inofensivo, desde la oposición han sostenido las críticas en su contra, como fue el caso del partido Mujeres Gabriela, en donde cuestionaron que besara a una mujer sólo para entretener a una multitud.

“El hecho de pensar que besar a una mujer entretendría a la gente (…) Es algo realmente enfermo”, indicó Joms Salvador, secretario general de la colectividad.

Por su parte, la mujer en cuestión fue identificada como Bea Kim según medios locales y en su cuenta de Facebook publicó un mensaje aclarando que todo había sido sin importancia. “Para mí, para él, no significa nada”, sostuvo.