Llevan 24 horas de duelo en las redes. Este mediodía la exvicepresidenta ironizó con los horarios de sueño del libertario y aseguró que "lo que menos necesitamos hoy, es un presidente amenazando por internet".

Arden las redes del presidente Javier Milei y la exvicepresidenta Cristina Kirchner desde la tarde de ayer, cuando Victoria Tolosa Paz arrojó la piedra (sin esconder la mano) confirmando que el líder libertario había firmado un decreto aumentando casi 50% su sueldo y los de sus ministros. Esa afirmación fue un misil bajo la línea de flotación presidencial, y derivó en un volcán tuitero todavía en erupción.

Según consignó nuestro medio asociado, Perfil, esta madrugada, Milei oficializó que había dejado sin efecto ese decreto, que en principio adjudicó a otro de CFK de hace unos años, pero elevó la vara de las chicanas preguntándole a Cristina “que le parecía si además del decreto de los aumentos, anulaba también los $ 14 millones de su jubilación”.

La respuesta de Cristina Fernández

Pasaron 12 horas para que Fernández meditara su respuesta, que llegó exactamente a la 1 del mediodía, con tono mesurado, y apelando a la ironía para burlarse del posteo de madrugada del libertario “cuando debería estar durmiendo”.

Si bien en ese mensaje se refiere a “la amenaza”, omite la palabra “jubilación”, dado que el impactante haber previsional se convierte en terreno resbaladizo cuando de discusiones tuiteras se trata.

“Buen día Presidente. Hoy por la mañana pude leer el posteo que me dedicó… ¡A las 0:30 de la madrugada! ¿Qué hacía presidente a esa hora amenazando por redes? Me hizo acordar a una canción de Los Redondos: “Alien Duce el pequeño gran matón de la Internet””, arrancó CFK en su respuesta, incluso con alusión musical vía Indio Solari, para recomendarle “cálmese Presidente, en ese lugar que usted hoy tiene el honor de ocupar, hay que tener templanza y sobre todo estar tranquilo y descansar en los horarios habituales que lo hace la gente”, twitteó.

Hasta se permitió, con tono claro de quien sabe de qué habla, sugerirle: “Créame que es muy dura la tarea de gobernar la Argentina”, para rematar con “lo que menos necesitamos hoy, es un presidente amenazando por internet”.