El exguerrillero Gustavo Petro reconoció su derrota de este domingo en la segunda vuelta de las presidenciales de Colombia que fue ganada por el derechista Iván Duque.

“Por ahora no seremos gobierno”, escribió el exalcalde de Bogotá en Twitter minutos después de que la autoridad electoral reconociera como nuevo presidente a Duque, delfín del controvertido exmandatario Álvaro Uribe.

De 41 años, el exsenador derechista obtuvo el 53,95% de los votos frente al 41,83% de Petro, con el 99,62% de votos escrutados.

Pese a la derrota, el exguerrillero de la disuelta organización rebelde M-19 alcanzó poco más de ocho millones de votos, el mayor apoyo registrado por un candidato de izquierda en Colombia.

Petro, de 58 años, prometía una defensa férrea del acuerdo de paz que el año pasado desarmó a la exguerrilla FARC, y una batería de reformas económicas y políticas para romper con la gobernanza histórica de la derecha.

El aspirante de izquierda le devolvió a la política colombiana los discursos de plaza y la convocatoria de multitudes.

Aunque en la carrera para el balotaje, al que accedió con el 25% de los votos en los comicios del 27 de mayo, se alejó de las calles y no pudo sostener ningún debate televisado ante la negativa de su contendor.

Sus propuestas de impuestos para los latifundios improductivos, tránsito hacia una economía no dependiente del petróleo y el carbón, y críticas a la actual política antidrogas pusieron a temblar a las élites, que apoyaron a Duque.

Ahora, Petro podrá liderar la oposición, ya sea en la plaza pública o como senador, en caso de que acepte regresar al Congreso como establece una reforma política de 2015 para el derrotado en el balotaje.