El Festival de la Canción de Viña del Mar ha significado durante décadas el evento más importante de Chile y Latinoamérica para cantantes y bandas. Desde su primera versión en 1960, se trata de un escenario obligado tanto para artistas consolidados como en ascenso, dado el alcance internacional del evento, su público y sobre todo su trayectoria.

Este 2021 se habría realizado la edición número 61 del gran evento, sin embargo, la pandemia del coronavirus significó un cambio de planes para la organización, decidiéndo no realizarlo por primera vez en su historia.

Aunque un año sin la celebración no es suficiente para olvidar que el mes de febrero es sinónimo del Festival de Viña del Mar y, en esos recuerdos, es inevitable pensar en las grandes presentaciones musicales que han dado que hablar a los espectadores durante cada verano.

El Festival ha dejado momentos memorables, algunas presentaciones han sido el plato fuerte del año, donde el Monstruo entregó todos los premios a los artistas. Ciertos de ellos fueron tan aclamados que participaron en más de una jornada o volvieron años después, convirtiendo la Quinta Vergara en un escenario recurrente para su carrera.

En sus 60 años de trayectoria, el escenario ha recibido música de diversos géneros, donde el público ha podido desde bailar hasta enamorarse y algunas de las más recordadas presentaciones las recopilamos a continuación.

Sandro

Con dos presentaciones en los años 1968 y 1975, el intérprete de Rosa Rosa, Una muchacha y una guitarra y Así, entre otros éxitos, deleitó a sus seguidores y provocó el delirio de sus más fieles fanáticas.

Soda Stereo

Los argentinos fueron un ícono del rock latino y se presentaron dos noches en 1987, aunque fue la única invitación de la banda. Más tarde, en 2007, su vocalista Gustavo Cerati se presentó como solista.

Los intérpretes de Música ligera, Persiana americana y Prófugos eran indispensables en las radios durante aquella época, por lo que su presentación en Viña del Mar los terminó de consolidar como una de las bandas de rock en español más influyentes.

Juan Gabriel

El cantautor mexicano tuvo una exitosa carrera que lo trajo al escenario del Festival de Viña en 1996, 1997, 1998, 2002, 2004. Durante los años noventa su fama pegó con fuerza en nuestro país, donde éxitos como Querida y Hasta que te conocí pasaron a ser de los temas más solicitados en las radios.

Así, el artista se adjudicó varias presentaciones que obligaban al equipo técnico a extender la jornada para dar abasto a un número que, para sus fanáticos, siempre se tornaba insuficiente.

Shakira

La cantautora colombiana tiene una trayectoria directamente ligada al Festival de Viña, donde su participación en la Competencia Internacional de 1993 con la canción Eres la impulsó a la fama y con eso comenzó una exitosa carrera que la llevó a ser invitada en 1997.

La autora de Antología, Inevitable y ha sido un número solicitado en varias ocasiones para ser parte otra vez del evento, aunque nunca más ha sido posible contar con su participación.

Celia Cruz

La cantante cubana se presentó en el año 2000 en el escenario de la Quinta Vergara e hizo bailar a todos los espectadores con La vida es un carnaval y sus otros éxitos.

La intérprete se llevó todas las miradas al ser declarada Reina de Viña de aquel año, aunque marcó un hecho histórico al ser la única ganadora de este título que no realizó el tradicional “piscinazo”.

Los Prisioneros

Los chilenos se presentaron en la Quinta Vergara en dos ocasiones, en 1991 y en 2003, siendo esta última una de las puestas en escena más polémicas del Festival. Jorge González, Miguel Tapia y Claudio Narea, la formación original de Los Prisioneros, tocaron en el contexto de la denominada “noche chilena”.

Como es de esperar, González lanzó duros cuestionamientos en el transcurso de la presentación. Uno de ellos fue “curita con el sermón, en el canal de la televisión”, en alusión al sacerdote Raúl Hasbún y sus editoriales en Canal 13 donde se oponía a los programas de educación sexual. Pese a que el número comenzó con pifias por parte del público, terminó siendo un éxito.

Chayanne

El puertorriqueño se ha presentado siete veces en el Festival de Viña en los años 1988, 1991, 1998, 2000, 2002, 2008, 2011. El cantante siempre deslumbró con su presentación de alto nivel musical, en compañía de un equipo de bailarines, que se han caracterizado por ser el sello de sus interpretaciones.

En 2011, el artista interpretó sus grandes éxitos entre los que destacó Fiesta en América, Tu pirata soy yo, Completamente enamorados y Salomé. Si bien recibió algunas críticas por el uso de playback en algunas canciones, sus presentaciones suelen ser recordadas por su gran nivel.

Morrisey

El líder de The Smiths hizo polémica en 2012 por cantar con la camisa abierta ante una sorprendida Quinta Vergara. Aunque, su cuestionado comportamiento comenzó mucho antes de que pisara el escenario.

Morrissey tuvo diferencias con varias personas del Festival. Solicitó que no se ofrecieran menús con carne mientras él estuviera en la Quinta y también solicitó que la entonces animadora, Eva Gómez, se quitara sus zapatos por tener plumas, en una clara defensa por los animales.

Sumado a eso, también ignoró los galardones que le fueron entregados, dejándolos en el escenario.

Luis Miguel

El “sol de México” es otro de los artistas recordados por su gran cantidad de presentaciones en Viña del Mar, aunque a diferencia de otros cantantes, Luis Miguel suma cinco shows en la Quinta Vergara en 1985, 1986, 1990, 1994, 2012.

Además, hubo una invitación al Festival para 2019, aunque el intérprete de La incondicional y Ahora te puedes marchar rechazó la oferta.

Miguel Bosé

El músico nacido en Panamá, aunque también cuenta con las nacionalidades española, italiana y colombiana, es recordado como uno de los cantantes con más presentaciones en la Quinta Vergara a lo largo de su trayectoria musical.

Las invitaciones al Festival han llevado al artista a visitar Viña del Mar en 1981, 1982, 1984, 1994, 1997, 2001, 2005, 2008, 2013 y 2018. En esta última oportunidad fue el encargado de abrir el evento que significaba su décima presentación festivalera.

Tras interpretar su éxitos como Amante bandido, Amiga y Morena mía recibió un premio especial, denominado el Ícono de Viña. El galardón fue duramente criticado en redes sociales por su diseño estilo collage. Sumado a eso, el artista no pudo llevarse el cuadro, dada la delicadeza del galardón y su peso de 3 kilos.