Alerta de Spoiler
Este artículo podría contener información clave sobre la trama de un libro, serie, videojuego o película.

Se acabó la larga espera. El pasado 6 de septiembre fueron estrenados los ocho nuevos capítulos de Élite, la serie española de Netflix creada por Carlos Montero, que muestra cómo un grupo de compañeros de colegio debe lidiar con el asesinato de una de sus integrantes.

Se trata de Marina (María Pedraza), una joven acomodada de 16 años que en la primera temporada resulta asesinada tras un golpe en la cabeza con el trofeo que le entregan al mejor estudiante de Las Encinas, el colegio de clase alta donde todo ocurre.

El crimen tiene lugar luego de que llegaran tres nuevos alumnos de clase baja al establecimiento: Samuel García (Itzan Escamilla), Nadia Shanaa (Mina El Hammani) y Christián Varela (Miguel Herrán). Esa es la razón por la que -injustamente- levantan sospechas.

En esta segunda temporada, la historia sigue girando en torno al asesinato de Marina. Y aunque la primera parte deja claro que el autor fue Polo (Álvaro Rico) -que por cierto es el mejor amigo del hermano de la víctima, Guzmán Nunier (Miguel Bernardeau)-, éste no va a la cárcel porque la policía culpa a Nano (Jaime Lorente), hermano de Samuel.

Pero más allá de la historia principal de la producción, hubo otros hechos que llamaron la atención. Desde nuevos personajes, hasta “desapariciones” y relaciones sexuales entre hermanos. Pon atención a lo que sigue.

1. El miedo de Cayetana

Con 21 años, la actriz española Georgina Amorós se convirtió en uno de los personajes más polémicos de la serie. Interpreta a Cayetana, una joven que reniega de su realidad socioeconómica para caer bien a los estudiantes de clase alta de Las Encinas.

Tanto así, que se encarga de ocultar que su madre es auxiliar de aseo en el mismo colegio en el que estudia, evitando dirigirse a ella cuando la ve en los pasillos.

Además, Cayetana también se gana la vida aseando hogares y limpiando vidrios, cuestión que no sabe nadie más que ella… hasta que la descubren.

Fue Lucrecia Montesinos (Danna Paola) quien revela su mentira, cuando se da cuenta que Cayetana organiza una fiesta benéfica para ayudarse a ella misma, estafando a millonarios con la excusa de que ayudaría a gente de escasos recursos.

2. ¿Dónde está Samuel?

Samuel fue el verdadero protagonista de esta segunda entrega. El primer capítulo comienza con una cuenta regresiva de su “desaparición”. La policía y sus compañeros de colegio lo buscaron incesantemente durante casi toda la temporada.

La teoría más convincente estaba relacionada con la investigación que había realizado por su cuenta, para lograr quitarle el estigma de asesino a su hermano. Y es que descubrió que Polo y su novia, Carla (Ester Expósito) estaban detrás de la muerte de Marina, por lo que ellos, con sus influencias, pudieron mandarlo a desaparecer.

Por otro lado, para obtener dinero, Samuel se introdujo en el peligroso mundo del tráfico de drogas, lo que le trajo más de un problema con su competencia en el comercio ilegal.

Durante la búsqueda, las autoridades encontraron la chaqueta del joven con una mancha de sangre, lo que aumentó las sospechas de un nuevo crimen que remecería a Las Encinas.

Pero la realidad estaba muy lejos. Samuel estaba escondido en la casa de campo de Guzmán, luego de llegar a un acuerdo con él para hacer sentir culpables a Polo y Carla, y lograr que confiesen.

View this post on Instagram

🧸

A post shared by ITZZZAN (@itzan.escamilla) on

3. Omar y Ander

La historia de amor imposible de Omar Shanaa (Omar Ayuso) y Ander Muñoz (Aron Piper) rompió con todos los esquemas. Y no es porque sean una pareja gay. De hecho, eso no es tema. El problema es que Omar viene de una familia musulmana, muy conservadora. No obstante, a pesar de tener todo en contra y algunas crisis de pareja, la relación se consolidó.

El personaje de Ayuso se rebeló contra su padre, que lo tenía obligado trabajando en una tienda, y se fue a vivir junto a Ander, donde se apoyan a pesar de todos los obstáculos.

La mayor dificultad para Ander comenzó cuando Polo, quien era su mejor amigo, le confesó la autoría del crimen de Marina. En el momento en que Omar se enteró de que su novio lo sabía todo y no acudió a la policía, se produjo una de las escenas más emotivas de la temporada.

“Te pusieron en una situación imposible y no supiste reaccionar. La cagaste, sí. Eres un ser humano. La cagamos todo el rato. Si crees que por todo esto vas a conseguir librarte de mí… lo llevas claro”, le dijo Omar.

View this post on Instagram

Prepárense!!

A post shared by ILL (@aron.piper) on

4. Incesto

El chileno Jorge López llegó a revolucionar la producción. ¡Y vaya de qué manera! El joven actor interpreta a Valerio, un estudiante que arriba desde el otro lado del Océano Atlántico a estudiar en Las Encinas.

El personaje es bohemio: le gustan las fiestas, el alcohol y las drogas, y no le importa mucho lo que piensan los demás. Eso queda claro cada vez que organiza o asiste a una fiesta junto a sus compañeros.

Pero, sin duda, lo que más llamó la atención es que tiene una relación sentimental con su media hermana Lucrecia.

Tan poco le importa lo que piensan de él, que en uno de los últimos capítulos decide sacar a la luz el polémico amorío delante del padre que ambos comparten.

Y es que mientras están cenando en familia, Valerio comenzó a tocar sexualmente a Lu con su pie, por debajo de la mesa. En eso fue que le pidió al padre que mire por debajo y se encuentra con la escena.

5. Polo

La “desaparición” de Samuel produce los efectos esperados y, aunque la policía encuentra al joven en la casa de Guzmán y se entera del plan que tenía para hacer confesar a Carla y Polo, deciden apoyarlo y continuar con la mentira.

Así fue como Carla, sumida en la culpa, confesó todo lo que sabía sobre el asesinato de Marina, por lo que la policía detiene a su novio Polo.

Pero lejos de lo esperado, el verdadero culpable sale libre dos semanas después y vuelve a Las Encinas, dejando boquiabiertos a sus compañeros de colegio.

View this post on Instagram

Tú ♥️

A post shared by Álvaro Rico (@alvaroricoladera) on