Medios de Estados Unidos aseguraron que el célebre actor Ewan Mcgregor y su ahora exposa Eve Mavrakis sellaron su divorcio, luego de haberse separado en 2017. No obstante, la situación salió bastante cara al actor, quien deberá compartir los derechos comerciales de Star Wars, entregar autos, propiedades y altas sumas de dinero.
La pareja, que estuvo 20 años casada y tuvo cuatro hijos, se distanció a mediados de 2017, luego que se descubriera una infidelidad del artista de Escocia con la actriz Mary Elizabeth Winstead, quien fuera su compañera en la serie Fargo.
Según detalló TMZ, Mcgregor deberá dar a su exconyuge la mitad de la fortuna que ganó en su carrera. Estas incluyen las ganancias por su rol de Obi-Wan Kenobi en Star Wars.
Junto con eso, el acuerdo indica que el actor dividirá con Mavrakis las regalías por las películas y programas de televisión donde participó antes de la ruptura.
También se incluye la repartición de 1.5 millones de dólares que ganó en la cinta Christopher Robin: un reencuentro inolvidable, que fue estrenada en 2018.
View this post on InstagramEwan at the Critics' Choice Awards, 2018. 😍🔝
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Además, Mcgregor deberá desembolsar mensualmente un total de 35.868 dólares por la manutención de su exesposa, a lo que se suman otros 14.934 dólares para el cuidado de la hija menor de la pareja, que tiene nueve años.
Asimismo, Eve Mavrakis recibirá un total de cinco autos de lujo que eran parte de la colección de 30 vehículos del actor, que se declaraba fanático por el “mundo tuerca”.
Se suma a eso que la mujer se quedará con la mansión que el matrimonio tenía en Los Angeles, Estados Unidos, la cual está avaluada en siete millones de dólares. También será poseedora de joyas y 501.704 dólares para compensar la división de bienes.
Hay que señalar que la infidelidad de Mcgregor quedó al descubierto luego que el diario inglés The Sun publicara fotos donde aparecía besando a Mary Elizabeth Winstead, quien actualmente es su pareja.
El divorcio fue pedido por Mavrakis a comienzos de 2018, indicando que había “diferencias irreconciliables”. Aquello marcó además el distanciamiento de la estrella de Hollywood con sus tres hijas mayores.
