El actor Jimmy Bennett, que acusa a la actriz italiana Asia Argento de haber abusado sexualmente de él en 2013, confirmó el domingo, en una cadena italiana, haber tenido una “relación sexual completa” no consentida, que cambió su vida.

“Todo se produjo muy rápido”, declaró Bennett en la noche del domingo en directo, en un plató del canal italiano La 7, junto a su abogado Gordon Sattro.

El joven, que tenía 17 años en aquel entonces, explicó que desde que entró en la habitación de hotel en el que Asia Argento, una de las principales voces del movimiento #MeToo, le había citado, ésta empezó a besarle.

“Primero pensé que era algo amistoso, una demostración de su afecto, pero luego sus besos se hicieron más largos y entendí que ella buscaba otra cosa”, explicó el actor y cantante de rock estadounidense, de 22 años en la actualidad, según la traducción italiana de sus declaraciones.

Luego “ella puso sus manos sobre mí, me empujó hacia la cama y me quitó el pantalón”, aseguró, agregando que tuvo lugar una “relación sexual completa”.

Asia Argento, 20 años mayor que él, negó toda relación sexual con Jimmy Bennett pero admitió haberle pagado dinero.

EL joven y su abogado confirmaron haber pedido dinero, 3,5 millones de dólares, a la actriz italiana. Ésta efectuó un primer y único giro de 380.000 dólares, según el diario New York Times, pero el abogado de Bennett evocó la suma de 200.000 euros.

Al ser preguntado sobre porqué guardó silencio tras esta supuesta agresión, y sobre una demanda de compensación financiera presentada años después de los hechos, Bennett explicó haber estado sumido en un periodo de gran confusión tras la agresión, que cambió su vida, según él.

Paradójicamente, fue el movimiento #MeToo el que lo animó, aseguró, a solicitar la ayuda de un abogado. “No quería desacreditar a Asia”, afirmó, para justificar su petición de compensación financiera, añadiendo que pensaba que nadie creería su versión de los hechos.

Jimmy Bennett afirmó que cedió a las insinuaciones de Asia Argento porque ésta le habló de un filme que quería hacer con él. “Confiaba enormemente en Asia”, declaró, pero “ella abusó de su poder”.

Asia Argento devino una importante portavoz de las mujeres víctimas del acoso en el cine al contar que fue violada cuando tenía 21 años por el productor Harvey Weinstein en su habitación de hotel, durante el festival de Cannes de 1997.