El editor francés de videojuegos Ubisoft, en medio de un escándalo de agresiones y acoso, anunció este domingo que varios ejecutivos dejan sus cargos, así como una remodelación de la dirección.

El número dos de Ubisoft, Serge Hascoët, la directora de recursos humanos Cécile Cornet y el jefe de los estudios canadienses Yannis Mallat dejan sus puestos.

Esto se produce tras “un examen riguroso llevado a cabo por la compañía en respuesta a recientes acusaciones de mala conducta y comportamientos inapropiados”, señala el editor.

Precisamente el número dos de la empresa “Serge Hascoët ha optado por dimitir de su cargo de director creativo, con efecto inmediato”, que será asumido de forma interina por Yves Guillemot, presidente director ejecutivo de Ubisoft, subrayó.

“Ubisoft no ha sido capaz de garantizar a sus colaboradores un ambiente de trabajo seguro e inclusivo”, lamentó Guillemot, citado en un comunicado difundido a primeras horas del domingo.

“Esto no es aceptable. Cualquier comportamiento tóxico se opone completamente a los valores con los que nunca he transigido y con los que no transigiré”, afirmó el dirigente.

Guillemot “supervisará personalmente una modificación completa del modo de colaboración de los equipos creativos”, prometió Ubisoft, que entre sus franquicias más exitosas destacan “Assassin’s Creed”, “Far Cry”, “Rayman” o “The Crew”.

La empresa, que cuenta con 18.000 empleados en el mundo, “también ha decidido reestructurar y reforzar la función de recursos humanos” y “auditará y mejorará sus procedimientos y políticas” en este ámbito, aseguró.

Muchos testimonios

La sección sindical Solidaires Informatique de Ubisoft había pedido el cese de Hascoët y Cornet, en una circular en línea que contenía testimonios de empleados publicados en la edición del sábado del diario francés Libération.

Desde finales de junio estos testimonios anónimos de empleados o antiguos trabajadores de Ubisoft aparecieron en Twitter, apuntando a altos cargos de los estudios de Toronto y Montreal, pero también en Brasil, Bulgaria y Estados Unidos. Algunos de los hechos se remontan a varios años.

Una exempleada explicó que un colega le pidió que le hiciera una felación durante una fiesta, otras afirmaban que un director creativo del estudio de Montreal había “lamido la cara” de una colaboradora durante una fiesta de la empresa.

“Estoy más determinado que nunca a aplicar cambios profundos para mejorar y reforzar nuestra cultura empresarial”, prometió el domingo el director ejecutivo.