El célebre comediante chileno Coco Legrand comenzó el proyecto en 2020 en plena pandemia. "Esperamos, con el tiempo, hacerlo crecer para que el patrimonio del humor en Chile sea cada vez más visible por todos”, comentó Rafael Gumucio, director del Instituto de Estudios Humorísticos UDP.
Coco Legrand donó su museo virtual del humor chileno al Instituto de Estudios Humorísticos de la Universidad Diego Portales. La ceremonia de entrega, se realizará hoy en las dependencias de la casa de estudios.
En Museohumor.cl, el comediante buscó dar cuenta “dónde nace y a dónde apunta este género del entretenimiento en Chile, a través de sus grandes exponentes y proyectos colectivos que le han dado forma”, detalla un comunicado de la UDP.
Legrand describió su iniciativa como una forma de proyectar “qué es el humor, de dónde nace y a dónde apunta, las innumerables formas que puede tomar y su vinculación con todas las artes y formas de expresión, desde el dibujo hasta el cine, rindiendo homenaje a las grandes personalidades de todos los tiempos que han hecho más alegre y distendida la vida a los chilenos con inagotable creatividad y talento”.
El Museo del Humor, como tal, surgió en 2020 en plena pandemia y en formato digital. A la fecha, ya cuenta con una recopilación de grandes clásicos nacionales e internacionales del género, entre los que destacan referentes como el grupo La Manivela (a quienes se les rinde un homenaje), Tato Cifuentes, Ana González, Jorge Romero “Firulete” y Sergio Feito, entre otros.
Exponentes más jóvenes como Natalia Valdebenito, Daniel Vilches, Jorge Alís y Stefan Kramer, entre otros, también son parte del museo.
“Todo este material será entregado en comodato a la Universidad Diego Portales, en específico al Instituto de Estudios Humorísticos, iniciativa creada para propiciar la enseñanza y reflexión en torno al humor”, detalla la UDP.
La idea de la casa de estudios es continuar alimentando el catálogo del proyecto, que hoy incluye galerías con muestras permanentes e itinerantes; perfiles de humoristas chilenos y extranjeros, contemporáneos y clásicos, cada uno con su ficha biográfica, fotografías, audios y videos; una sección de interacción y contacto entre el museo y el público para crear grupos de amigos, seguidores, búsquedas de archivo, nuevos talentos y colaboradores; y una cartelera para anunciar eventos, exposiciones y programaciones.
“El Museo del Humor de Coco Legrand es una verdadera oportunidad mágica para entrar en el mundo del humor y esperamos, con el tiempo, hacerlo crecer para que el patrimonio del humor en Chile sea cada vez más visible por todos”, comentó Rafael Gumucio, director del Instituto de Estudios Humorísticos UDP.
