Una indemnización de 140 millones de pesos tendrá que pagar el Fisco a la familia de un miembro del MIR ejecutado en 1975 en el estadio El Morro de Talcahuano. Así lo determinó la Corte Suprema al rechazar un recurso del Consejo de Defensa del Estado.
Óscar Arros fue detenido en Lota en septiembre de 1975, por funcionarios de la DINA, siendo acribillado en el lugar, y sus restos trasladados posteriormente a la morgue lotina, donde fueron entregados a sus familiares.
El caso fue investigado por el ministro por violación de derechos humanos, Carlos Aldana, que en primera instancia acreditó la responsabilidad de un ex miembro de la Armada en el homicidio y determinó la reparación económica, sentencia confirmada después por la Corte de Apelaciones de Concepción.
Ahora la Corte Suprema, al revisar un recurso de casación del Consejo de Defensa, ratificó el pago de los 140 millones de pesos, según informó el abogado del Programa de Derechos Humanos, Patricio Robles.
La impugnación del Consejo argumentó la supuesta prescripción de la responsabilidad civil en esta causa, lo que fue rechazado por el máximo tribunal del país.
En la arista penal la condena del oficial en retiro de la Armada, Arturo Calderón Pasalaqua, como autor material del disparo que mató a Arros quedó a firme, dijo el abogado Robles.
La indemnización establecida por la responsabilidad del Estado en este asesinato se divide en 80 millones de pesos para la viuda Nelly Neira Castro, y 60 millones de pesos para Eli, hija de Óscar Arros.