El Gobierno confirmó que las 167 viviendas ubicadas en el lado sur de Chaitén, serán tasadas para cobrar arriendo a las familias, a pesar de estar ubicadas en una zona de peligro tras la erupción volcánica que afectó a la zona.

Tras varios años de negativa de los Gobiernos de Sebastian Piñera y de Michelle Bachelet en su primer mandato, por habilitar el lado sur de Chaitén, por el peligro que revisté para los habitantes, ahora el panorama podría cambiar, a pesar de que no se han realizado obras significativas para dar seguridad.

El Ministerio de Bienes Nacionales, comenzará a notificar y tasar las viviendas que fueron compradas por la cartera en su minuto, para cobrar un arriendo a las familias que están en calidad de “okupas”, en una denominada área congelada, propuesta en el proyecto del plan regulador de Chaitén.

El lado sur se formó tras el paso del río Blanco por la mitad de la ciudad tras la erupción del volcán, y que hasta ahora no había sido considerado por las políticas de Gobierno, por ser inhabitable, sumado a que aún no se termina el enrocado del cauce.

El seremi de Bienes Nacionales en la región de Los Lagos, Claudio Ferrada, manifestó que por instrucción del intendente Leonardo de La Prida, funcionarios comenzarán a realizar el procedimiento, para administrar estás viviendas ocupadas de manera irregular.

Sobre el precio del arriendo, el titular regional de Bienes Nacionales no se refirió, pues explicó que se trabajará en aquello, ya que argumentó que esta es una solicitud que realizó la misma comunidad.

Sumado a la regularización de las casas del lado sur, también ya se comprometieron la construcción de una cancha de fútbol y la materialización de una pasarela que una los sectores norte y sur de Chaitén, a 7 años de la catástrofe natural.