Si tu trabajo actual drena toda tu energía o no te provoca nada en absoluto, quizás sea tiempo de buscar algo nuevo. Aunque no siempre puedes estar en el empleo de tus sueños, la idea es que te sientas a gusto, aprendas y puedas desarrollarte profesionalmente.
Si bien a veces vale la pena intentarlo, otras no, especialmente cuando la situación está afectando tu salud y bienestar físico o mental.
A continuación revisa algunas señales de que deberías renunciar a tu trabajo, según el portal de negocios Business Insider.
1. Ya no estás aprendiendo
Si estás aburrido porque has dejado de aprender cosas nuevas, puede que sea hora de buscar nuevos horizontes.
Según Ximena Vengoechea, Gerente de operaciones de productos móviles de LinkedIn, cuando aprender cosas nuevas -incluso aquellas que no son de tu particular interés- te mantienes motivado, renovado, y cada día parece una aventura. Esto puede significar,oportunidades para trabajar en nuevos proyectos, relacionarte con gente nueva, etc. “Sin embargo, cuando este tipo de oportunidades de aprendizaje desaparecen, las cosas pueden ser bastante aburridas y tu carrera puede estancarse”, dice.
2. Tus habilidades no están siendo valoradas
Si te has dado cuenta de que eres demasiado cualificado para tu trabajo, entonces vale la pena ver si hay una oportunidad para crecer en tu empresa. Pero si no la tienes, podría ser el momento de mirar a otra parte.
3. Odias tu trabajo
Algunos trabajos son peldaños para tu trabajo ideal y requieren enfrentar algunas tareas desagradables, sin embargo, otros son completamente un desastre. Una buena manera de diferenciar entre los dos es mirar al jefe de tu jefe, si estarías feliz con ese trabajo, entonces estás en el camino correcto. “Si no, entonces es el momento de empezar a buscar otro trabajo”, dice Amanda Agustine, experta del sitio web laboral TheLadders
4. No encajas en la cultura de tu empresa
Cuando eres empleado, eres parte de un equipo, pero si sientes que no encajas después de 6 meses, probablemente deberías encontrar un ambiente de trabajo más adecuado a tu personalidad y valores.
5. Tu jefe es terrible
Un mal jefe puede ser matón, arrogante, o un líder débil. En definitiva, si sus carencias están afectando tu productividad y felicidad, tal vez no vale la pena aguantar.
6. Tu empresa está en una espiral descendente
Si tu empresa está en un período de dificultades financieras, o una próxima fusión o adquisición amenaza a tu departamento, no hay razón para quedarse en un barco que se hunde.
7. Tu salud se ve afectada por el estrés y la ansiedad.
Cuando comienzas a sufrir dolores, ataques de ansiedad, o un estado general de la melancolía, es momento de considerar nuevas opciones de trabajo.
8. Tus relaciones personales están sufriendo a causa de tu trabajo.
Dedicar mucho tiempo a tu trabajo puede ser gratificante, pero cuando causan conflictos familiares, es posible que evalúes si vale la pena el sacrificio.
9. Tus funciones han aumentado, pero tu sueldo no
Si notas que tu trabajo va en aumento, pero el sueldo sigue siendo el mismo, quizás es hora de solicitar directamente un incremento en tus ganancias o buscar opciones que compensen de manera justa tu esfuerzo.
10. Despiertas con miedo de empezar el día
Cuando despiertas cada mañana con una abrumadora sensación de temor, trata de identificar la causa y háblalo con tu empleador. Si encuentras que no hay manera de escapar de la infelicidad que te provoca tu trabajo, entonces es hora de irte.
11. Anhelas algo más
Puedes amar mucho tu trabajo, pero si ves que no avanzas en tu carrera y que no tienes oportunidades de probar cosas nuevas, tal vez es hora de buscar un nuevo horizonte.