En el marco de la ceremonia del Día Nacional de los Pueblos Indígenas en La Moneda, la presidenta Michelle Bachelet entregó los lineamientos generales de la política del Gobierno sobre pueblos originarios, basados en tres pilares: la participación política, una nueva institucionalidad y el desarrollo territorial de las comunidades.

En el We Tripantu, que se celebró en el Patio El Canelo, la Mandataria participó en una rogativa a cargo de un representante indígena. En la ocasión participaron también el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, el canciller Heraldo Muñoz, y otras autoridades.

“En materia de territorio, fortaleceremos el programa de compra de tierras para cumplir con todos los acuerdos y compromisos tomados por los gobiernos democráticos anteriores. Ya hemos desarrollado el catastro que nos permitirá comprar tierras en los próximos cuatro años, lo que tendrá además un acompañamiento técnico y productivo para las comunidades”, dijo la jefa de Estado.

Según se indicó en la actividad, la política del Gobierno está dirigida a los pueblos Aymara, Quechua, Atacameño, Kolla, Diaguita, Rapa Nui, Mapuche, Yagan y Kawesqar.

Respecto a la participación política, la presidenta señaló que “toda la experiencia internacional demuestra que garantizar participación política de los pueblos indígenas, en los distintos niveles de toma de decisiones, es un factor fundamental de reconocimiento y de integración”.

“Se trata de llevar adelante una reflexión seria, con altura de miras, que tenga como objetivo que los pueblos indígenas adquieran representación política efectiva en el Parlamento”, precisó.

Sobre la nueva institucionalidad, señaló que se trata de “superar las dificultades que hemos tenido como país en este aspecto, pero también para enfrentar los desafíos de una agenda indígena moderna e integral”.

La mandataria además anunció que para ello se creará el Ministerio de Asuntos Indígenas y el Consejo de Pueblos Indígenas, los que serán sometidos a consulta, siguiendo el convenio 169 de la OIT.

El proceso de consulta consta de cinco etapas: planificación, información, deliberación, acuerdos e informe final. Esta etapa está previsto que dure 6 meses, tras lo cual surgirán los proyectos de ley para enviarlos el Congreso.

En tanto, el tercer y último pilar de la política indígena del Ejecutivo se refiere al desarrollo territorial. Bachelet, junto con señalar que fortalecerán el programa de compra de tierras, indicó que “estableceremos por ley las áreas de desarrollo indígena a lo largo del país, de modo que cuenten con nuevo presupuesto y poder en sus localidades para asignar esos recursos a proyectos pertinentes para su desarrollo y el de sus comunidades”.