El partido que disputaron la noche del miércoles Unión Española con Independiente del Valle por la Copa Libertadores, tuvo un protagonista secundario que seguía desde Argentina minuto a minuto las emociones del pleito.

Y es que a la misma hora en el Nuevo Gasómetro San Lorenzo recibía a Botafogo y aunque parezca increíble, tanto los argentinos, como los brasileños y los ecuatorianos tenían opciones de acompañar al elenco chileno en la siguiente fase del torneo. Todo dependía de los marcadores.

El primero en ‘bajarse’ de la lucha fue el Botafogo, ya que los de Boedo dominaron de principio a fin el encuentro. Los trasandinos esperaban ganar por la mínima ventaja, pues sabían que era muy difícil que la escuadra de Ecuador venciera a la Unión Española en el Santa Laura… sin embargo esto último se dio y complicó aún más las cosas.

De hecho, mientras la gente de San Lorenzo celebraba el 2 a 0 de su escuadra y alentaba feliz, llegaron las anotaciones de Independiente del Valle que pasó a ganar 3 a 1 y los rostros de alegría se transformaron en llantos. Los ecuatorianos daban la sorpresa y los argentinos, pese a la gran victoria, estaban quedando eliminados.

Después, cada gol de los ‘rojos’ en Chile fue vitoreado en el Nuevo Gasómetro. Con el 4 a 3 marcado de penal por Canales el estadio de los ‘santos’ revivió y fue una fiesta… hasta que los dos tantos finales de Independiente volvieron a enmudecer el reducto bonaerense.

Con el 5 a 4 de Independiente, los ‘azulgranas’ de Argentina estaban obligados a marcar el 3 a 0 para clasificar. Las emociones no paraban en uno y otro partido, hasta que Piatti consiguió la ventaja necesaria para el equipo del Edgardo Bauza en el minuto 89.

El final del grupo sería aún más épico. El partido de San Lorenzo terminó antes y los futbolistas se quedaron a esperar en la cancha el término del partido de Unión, que continuaba abierto para ambos elencos. Las caras en Argentina reflejaban angustia y nerviosismo, pero llegó el pitazo final y se armó el carnaval.

“Adentro de la cancha estábamos un poco perdidos y creo que sufrimos más ahora que en la final con Vélez”, explicó el volante Julio Buffarini, ya más tranquilo después de haber conseguido la clasificación, consignó Diario Olé.

“Primero 1-1, 3-2, 3-3, nos decían atacá, defendé, quedáte arriba… La verdad que no entendíamos nada. Pero bueno, nacimos para sufrir, esta es la realidad”, añadió el futbolista azulgrana.

Finalmente, en cuanto al próximo desafío en la Copa Buffarini aseguró que “vamos a esperar a cualquier equipo que nos toque, ya que creo que jugando de esta manera le vamos a dar pelea a cualquiera”.