Hasta el Tercer Juzgado de Policía Local de Viña del Mar llegó un grupo de estudiantes de la Universidad Andrés Bello para manifestar su molestia por la falta de una infraestructura adecuada en la casa de estudios que se ubica en la ciudad jardín.
En este sentido, los alumnos representados por el abogado Alejandro Chaparro, presentaron una demanda en contra del establecimiento de educación superior, amparándose en la Ley del Consumidor.
Los alumnos reconocen que la universidad les entregó ayuda a modo de compensación, pero que ésta no se condice con la realidad que han vivido, bajo la cual se han mantenido sin poder desarrollar sus clases en los lugares adecuados que fueron ofrecidos al momento de efectuar los pagos de las matrículas.
Recordemos que las dependencias de la nueva sede en Viña del Mar presentaron varias irregularidades que fueron denunciadas por el alumnado conjuntamente a los apoderados, en donde la Seremi del Trabajo incluso ordenó la suspensión de las obras hasta que las deficiencias sean solucionadas.
El establecimiento debía estar operativo para el mes de mayo del presente año.