Evelyn Matthei aseguró que cuenta con el absoluto respaldo de la Unión Demócrata Independiente (UDI), de cara a su flamante candidatura presidencial surgida tras la sorpresiva “bajada” de Pablo Longueira y que mantiene en suspenso las relaciones con sus socios políticos de Renovación Nacional (RN).
En entrevista con CNN Chile, la abanderada gremialista reiteró que se mantendrá en carrera a pesar que aún los partidos oficialistas no han logrado un acuerdo para levantar un postulante único, descartando de paso la eventual realización de primarias.
“Primarias es difícil, creo que ya a estas alturas organizar en todo Chile,ver quién va estar en las mesas, no es tan fácil, queda muy poquito tiempo. Si los partidos deciden y creen que lo pueden hacer, yo no tengo ningún problema”, indicó.
En ese sentido agregó que “primero tenemos que saber cuál va a ser el candidato, cuál será la forma de elegir, pero por ahora lo que estamos haciendo es una campaña absolutamente amplia, creo que es lo correcto en este minuto”. No obstante, sentenció que su partido “está total y absolutamente con entusiasmo detrás de mi candidatura”.
Aunque, Matthei prefirió no aludir directamente a Andrés Allamand, indicando que “lo dicho está en el pasado, en este momento lo que tenemos que buscar es unidad y no ofender a nadie”. “Hay que cerrar heridas y dar vuelta las páginas”, sentenció.
Respecto a la candidata del Pacto Nueva Mayoría, Michelle Bachelet, la ex ministra del Trabajo indicó que a su juicio es una ventaja ser mujer para competir con la principal carta del oficialismo.
“Sí, definitivamente es una ventaja ser mujer. Creo que los hombres realmente no se dan cuenta, en su vida cotidiana, de cómo discriminan a la mujer. Son temas culturales instalados, antiguos y poco hablados”, comentó.
Frente a las coincidencias que las unen, como ser hijas de ex comandantes de la Fuerza Aérea de Chile, Matthei enfatizó que la ex mandataria tiene un “perfil propio”, agregando que “nunca he sido tratada mi me he comportado como ‘la hija de’”.
No obstante, criticó la actitud de Bachelet frente a la acusación constitucional que finalmente terminó por sacar del Ministerio de Educación a Harald Beyer, pues sostuvo que “pudo haber evitado” la salida del académico que en su momento formó parte de comisiones consultoras durante el anterior gobierno de la ex jefa de ONU Mujer.
A propósito del Plebiscito de 1988, la ex secretaria de Estado reconoció que apoyó el “Sí”, aunque sostuvo que “no me parecía razonable” que el General Pinochet continuara al mando del país. “Apoyé el ‘Sí’ sabiendo que iba a perder, y defendí que era importante para el país que el ‘No’ ganara por un margen razonable y no por avalancha”, dijo.
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