La defensoría penal de Valdivia alertó sobre la agudización de medidas de presión para los reclusos de la cárcel Llancahue que exigen traslados a sus ciudades de orígenes debido a que temen por la muerte de algún reo en el marco de las protestas.

Ante la emergencia, un equipo multidisciplinario de la defensoría penal pública de Valdivia se reunió con el grupo de reos condenados de la cárcel Llancahue que este lunes agudizó sus protestas, comenzando a inferirse heridas en diversas partes del cuerpo, demandando su traslado a las cárceles de las ciudades en las que residen sus familiares.

El defensor Luis Soto señaló que en dicha visita se constató la existencia de cuatro internos que requirieron ser trasladados al hospital base de Valdivia, además de otro grupo que fue atendido en la cárcel, con lesiones menos graves.

Para el abogado Soto, la situación es preocupante debido a que en la cárcel Llancahue de Valdivia hay 300 condenados que han sido trasladados desde otros penales, por lo que la cifra de heridos podría incrementarse.

Para el abogado defensor, Gendarmería debe revisar sus protocolos, porque la institución ni siquiera garantiza las oportunidades para que los reos tengan buena conducta y puedan ser trasladados a los penales de origen.

En algunos casos, la ausencia de contacto con familiares les impide acceder a elementos que en la práctica son necesarios para cumplir con la buena conducta.

A la veintena de reclusos que ya inició una protesta hiriéndose con armas blancas, se suma otra cincuentena de internos en huelga de hambre, una cifra preocupante para el defensor de los internos.