La montaña Rtanj, al sudeste de Serbia, tiene forma piramidal y según algunos emitiría ondas electromagnéticas benéficas, por lo que se vio invadida por europeos que buscan protegerse del supuesto “fin del mundo” este 21 de diciembre.

La cima de esta montaña alcanza los 1.570 metros de altura y según indicó Nebojsa Gajic, el director del hotel ubicado en ella, ya no quedan albergues disponibles.

Gajic, sin embargo, manifestó su escepticismo ante el supuesto fin del mundo, explicando que 30% extra de turistas que han llegado este año se debe no sólo al fin del calendario maya, sino también a un seminario que se realizará en el lugar este jueves 20.

“Muchas personas llamaron suplicándonos que les encontráramos una habitación para poder sobrevivir”, comentó el hotelero.

Por su parte, desde la oficina de turismo de Boljevac, Marina Zikic indicó que nunca antes habían tenido tantos turistas, sin embargo también enfatizó que gran parte de las reservas son por el seminario “Espíritu de Rtanj”.

Cabe mencionar que si bien este evento no se enfoca en el fin del mundo, lo hace en la particular forma de la montaña: una pirámide perfecta, que hace que muchas personas crean que al encontrarse allí en un eventual cataclismo, podrían salvarse.