Ante un implacable avance del invierno, las aldeas de la zona costera del Bío-Bío resiente la falta de viviendas definitivas, mientras siguen habitando las de emergencia.

El Gobierno estaría acelerando las soluciones para los daminificados, entregándose esta semana viviendas difinitivas y preparando el diseño de una nueva población que tendrá 140 viviendas en la caleta de Tumbes.

Por otra parte trabajan en implementar un operativo de salud para niños y adultos, buscando paliar las posibles consecuencias de las bajas temperaturas en condiciones que no son las más favorables para la prevención.