El presidente húngaro, Pal Schmitt, se encontraba este viernes en el centro de un escándalo tras ser acusado de plagiar su tesis doctoral, y se negó a dimitir, arguyendo que “no hay relación” entre dicho trabajo y la función que ocupa.
El presidente se expresó ante la televisión pública el viernes por la noche, destacando que obtuvo su doctorado en 1992, y que fue elegido presidente de la República por sufragio universal hace un año.
El jefe de Estado húngaro, el cuarto desde el hundimiento del régimen comunista en 1989-1990, perdió el 29 de marzo su doctorado en la Universidad Semmelweis, que calificó de “plagio” su tesis sobre la historia de los Juegos Olímpicos, defendida hace veinte años.
El primer ministro conservador, Viktor Orban, del que Pal Schmitt es cercano, consideró el viernes por la mañana que la decisión de dimitir “pertenece únicamente al presidente de la República”.
Los partidos de la oposición pidieron todos la dimisión del presidente.