Los alemanes tendrán por primera vez un presidente y un jefe de gobierno formados en la ex Alemania Oriental (RDA), tras la elección como mandatario de Joachim Gauck, un pastor luterano de 72 años, prevista este domingo.

El nuevo mandatario será elegido por la Asamblea Federal, compuesta por los 620 diputados y por representantes de los Estados regionales. El anterior mandatario Christian Wulff anunció su renuncia a mediados de febrero, en medio de acusaciones de corrupción.

Gauck es el candidato de los partidos de la coalición gubernamental y de las principales formaciones de oposición, por lo cual se descarta que resultará electo.

La otra candidata a la presidencia, la “cazadora de nazis” Beate Klarsfeld, de 73 años, sólo cuenta con el apoyo de la formación de izquierda Die Linke.

Gauck es oriundo del noreste de Alemania, el mismo lugar donde creció la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel.

El padre de Merkel, Horst Kasner, era un pastor protestante que emigró en 1954 a Alemania Oriental, por lo cual Merkel, quien nació en Hamburgo, creció en el país comunista.

Gauck nació en enero de 1940 en Rostock (noroeste) y eligió ser pastor de la Iglesia luterana. En una República Democrática Alemana (RDA) donde las iglesias disfrutaban de cierta tranquilidad, Gauck utilizó su posición para defender los derechos humanos.

Por su parte, Beate Klarsfeld, junto a su marido, el abogado francés Serge Klarsfeld, ha localizado a numerosos criminales de guerra nazis y desvelado el pasado negro de varios dirigentes internacionales.

Die Linke, creado entre otros por antiguos comunistas de Alemania del Este, se opone a la candidatura de Gauck quien fue, tras la reunificación, el primer responsable de los archivos de la Stasi, la policía política de la RDA.

Klarsfeld dijo estar honrada por la perspectiva de ser elegida, aunque precisó que no estaba totalmente en línea con la política de Die Linke, en particular porque ella apoya a Israel.

Además, para ella, el presidente conservador francés, Nicolas Sarkozy, “condujo muy bien a Francia durante la crisis”.

“En momentos en que hubo una reciente ola de terrorismo de extrema derecha en nuestro país, presentamos una candidata que dedicó su vida a luchar contra los antiguos y nuevos nazis”, declaró Klaus Ernst, copresidente de Die Linke, refiriéndose al descubrimiento en noviembre de un grupúsculo neonazi acusado de 10 asesinatos en Alemania.

Beate Klarsfeld se hizo famosa en Alemania tras haber abofeteado en 1968 al canciller democristiano Kurt-Georg Kiesinger, en pleno congreso de su partido, porque había pertenecido al partido nacionalsocialista de Adolf Hitler.

Nacida Beate-Auguste Künzel en 1939 en Berlín, Klarsfeld vive en París y dirige con su esposo la asociación de hijos e hijas de deportados judíos en Francia.