La canciller alemana Angela Merkel dijo este lunes no estar segura de que las tropas alemanas puedan retirarse de Afganistán en 2014, en ocasión de una visita sorpresa a ese país.

Aún no se llegó al punto en que Alemania puede decir “que podemos retirarlas hoy”, dijo Merkel en declaraciones a la prensa alemana. “Por lo tanto no puedo decir si lo lograremos para 2013-2014. La voluntad está, queremos hacerlo y estamos trabajando en ello”, dijo.

En declaraciones hechas en Mazar i Sharif, en el norte del país, durante su primera visita desde diciembre de 2010 a las tropas alemanas desplegadas en Afganistán, Merkel pidió al gobierno de Kabul que avance en el proceso político de reconciliación con los grupos armados como los talibanes.

El proceso de reconciliación política registró avances pero no permite en este punto retirar las tropas de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán (ISAF) de la OTAN, según la canciller.

Poco antes la canciller mantuvo una conversación telefónica con el presidente afgano Hamid Karzai a quien le presentó su pésame por la muerte de 16 personas, entre ellos niños y ancianos, masacrados por un soldado estadounidense el domingo en la provincia de Kandahar, bastión talibán del sur de Afganistán.

Este es el cuarto viaje a Afganistán de la canciller alemana desde 2005. Tenía previsto visitar Kunduz también en el norte del país aunque al este de Mazar i Sharif. Tuvo que renunciar por un temporal de nieve.

Merkel también rindió homenaje a los 52 soldados de la Bundeswehr muertos en Afganistán desde que se desplegaron las tropas de la ISAF en 2001.

El contingente alemán en Afganistán fue fijado el 1 de febrero en 4.900 militares. Berlín es, en importancia, el tercer proveedor de tropas de la ISAF detrás de Estados Unidos y Gran Bretaña.