La normalización de las relaciones diplomáticas entre Venezuela y Estados Unidos, sin embajadores desde 2010, no se vislumbra en el corto plazo debido a la “imposición de la derecha reaccionaria” en Washington, afirmó este domingo el canciller venezolano, Nicolás Maduro.

“Hemos estado, por instrucciones del presidente Hugo Chávez, dispuestos a avanzar hacia un proceso de comunicación respetuosa y de regularización de las relaciones, (pero) más alla de eso se impone la derecha reaccionaria y no pareciera haber perspectivas en el corto plazo de que eso fuera de otra manera”, dijo Maduro en una entrevista al canal Televen.

Según el ministro, Caracas pide “respeto absoluto” y “reclama la no interferencia en los asuntos internos de Venezuela”, pero, afirmó, “pareciera imposible” que el gobierno estadounidense coincida en esos puntos.

Estados Unidos y Venezuela mantienen unas relaciones diplomáticas llenas de altibajos y no tienen embajadores desde finales de 2010. Además, Chávez acusa constantemente a Washington de intentar desestabilizar su gobierno.

La designación de representantes diplomáticos se encuentra en un callejón sin salida desde que Larry Palmer, embajador designado por Washington para asumir su legación en Caracas, fue vetado por Chávez debido a unas declaraciones que emitió sobre Venezuela durante su proceso de ratificación.

El último embajador, Patrick Duddy, salió de Caracas a mediados del año pasado y meses después Washington decidió retirar la visa diplomática del representante venezolano, Bernardo Álvarez, una medida suficiente para que éste, de vacaciones en su país, no pudiera regresar a su puesto.