El huracán Rina se intensificó este martes a categoría dos en la escala Saffir-Simpsons, de cinco niveles, mientras se encamina hacia la península mexicana de Yucatán, amenazando a los populares balnearios de Cancún y Cozumel, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

El reporte de las 12H00 GMT del NHC señala que Rina mantiene vientos de 160 kilómetros por hora y advierte que podría transformarse en un “huracán mayor” en la noche del martes o primeras horas del miércoles, antes de acercarse a la costa mexicana en la mañana del jueves.

Rina se ubica actualmente a 345 kilómetros al suroeste de las islas Gran Caymán y a 490 kilómetros al este-sureste de Chetumal, México, y se traslada con dirección oeste-noroeste a 6 kilómetros por hora, según el NHC, organismo con sede en Miami.

El NHC advierte además sobre un posible fortalecimiento de los vientos del huracán en las próximas horas.

Una advertencia de huracán rige para la costa este de la península de Yucatán, desde la localidad de Punta Gruesa hasta Cancún.

Una lancha rápida de la marina de Nicaragua con 27 personas a bordo se encuentra desaparecida desde el domingo, cuando realizaba tareas de evacuación de pobladores en zonas en riesgo de inundación.

El presidente Daniel Ortega había declarado el fin de semana el alerta para dos regiones autónomas del Caribe y ordenó evacuar a cientos de personas de sectores vulnerables a inundaciones, mientras Rina azotaba el domingo esa zona con categoría de tormenta tropical.

América Central aún lucha por recuperarse de recientes lluvias torrenciales que provocaron mortales inundaciones y deslizamientos de tierra, anegando tierras de cultivo y provocando daños por cientos de millones de dólares.

Más de 100 personas murieron en esa región, incluyendo 36 muertos en Guatemala, 34 en El Salvador y 18 en Honduras.

Rina es el sexto huracán y la decimoséptima tormenta con nombre que se registra en la actual temporada de huracanes en el Atlántico.