Rafael Nadal ya está 6-0 en Wimbledon. Sí, en dos partidos ha ganado ambos en tres sets sin ceder un parcial y dejando claramente afirmado sobre el césped de la central (que está empezando a mostrar ciertas señales de desgaste sobre todo en la zona de la base) que no solo defenderá el título del año pasado, sino también su chance de llegar nuevamente a la final y desde esa plataforma avizorar si será con Djokovic la final. En ese caso perderá el número 1 del mundo sin jugar pero habrá estampado su figura de enorme tenista.

Este miércoles de lluvia otra vez sobre Londres, el de Palma de Mallorca aprovechó que se utilizó el techo corredizo para preservar el court central y que la pelota le corrió más que cuando juega al aire libre y le ganó al norteamericano Ryan Sweeting por 6-3, 6-2 y 6-4 en dos horas y dos minutos de juego, colocándole, en tres sets, 38 winners y mostrando una tarjeta negativa con apenas 7 errores no forzados.

Nadal se hizo fuerte desde el fondo de cancha como siempre pero cuando desplazó a su rival hacia su izquierda (el lado del revés de Sweeting) subió varias veces a la red para ganar con bolea muy certera los puntos justos.

Sweeting, un joven americano con poco recorrido aun en el circuito grande mostró cosas interesantes como un durísimo primer servicio plano y un buen revés a dos manos aunque una errática derecha.

Rafa ya está en tercera ronda casi sin despeinarse, apropiándose otra vez de la cancha principal de Wimbledon cuyo público lo ovacionó nuevamente, casi como a un hijo propio. El manacori como es habitual en él respondió con su esfuerzo, sus contragolpes y la certeza de sus golpes siempre ubicados, disparos con mucho peso y altura que suelen demoler el esfuerzo de los contrarios. Así le pasó a Sweeting por momentos, perdiendo puntos que podía dominar. Y contra Nadal, eso es terminal…

Entre los partidos que la lluvia permitió terminar en el primer turno y hasta que pudieron reanudarse los del segundo turno se han destacado las victorias de Tomás Berdych (6) finalista del año pasado ante Julián Benneteau, el francés, por 6-1, 6-4 y 6-2; la del francés Richard Gasquet (17) ante Igor Kunitysn por 6-1, 6-4 y 6-4, la de Mardy Fish (10) frente a Denis Istomin por 7-6, 6-4 y 6-4 y la muy buena victoria del norteamericano Alex Bogomolov Jrs ante el argentino Juan Ignacio Chela (25) por 6-0, 6-3 y 6-4.

VENUS Y OTRO PASO

La norteamericana Venus Williams se encontró con la veterania y experiencia de la japonesa Kimiko Date (40 años…) y la central (también bajo techo cubierto) se transformó en escenario de un partidazo que quedó en manos de la ex número 1 del mundo por 6-7, 6-3 y 8-6 en casi tres horas de juego.

Date que está con más ritmo de juego que Venus porque ha partido con la competencia desde enero pasado, hizo sentir esa diferencia hasta el final, con sus golpes planos y profundos que se encontraron con cierta inmovilidad de su oponente cuando la pelota le llegaba muy encima. Sobre el final, la jerarquía de Venus se abrazó a sus servicios, los que le dieron la luz suficiente, más un quiebre en el decimocuarto juego para llevarse el partido. “Kimiko me sorprendió por su estado físico y su consistencia. Pero nunca pensé que iba a perder este partido. Me costó adaptarme pero finalmente logré la victoria porque confié en mis devoluciones y mi servicio”, dijo la tenista americana que jamás perdió segunda ronda desde que juega el Abierto de Inglaterra.

Wimbledon sigue, esquivando a la lluvia cuando se puede y reprogramando partidos. Pero en sus oficinas están todos tranquilos: Rafael Nadal y Venus Williams, cada uno por su lado, están en tercera ronda. Y ello garantiza espectáculo…

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