El Gobierno expresó su preocupación a parlamentarios de RN y la UDI sobre las consecuencias políticas de la acusación constitucional presentada por diputados opositores contra la intendenta Jacqueline Van Rysselberghe.

En una minuta emitida desde el Palacio de La Moneda a los partidos oficialistas, sobre temas de contingencia, el Ejecutivo señala en un capítulo dedicado a la acusación, la preocupación por el daño en sus pilares éticos y la eventual proyección de un quiebre latente en la Coalición por el Cambio.

El escrito señala además que en cuanto a oportunidades, la instancia da la opción de demostrar por parte de la derecha la debilidad jurídica y advertir el uso político de la acusación constitucional, poniendo presión sobre esta.

Luego, en un capítulo sobre las amenazas que el oficialismo ve en la presentación, señalan en primer lugar, el daño a los pilares éticos del Gobierno, es decir, probidad, credibilidad e igualdad ante la ley.

Como segunda amenaza, temen que se instale la imagen de que se le dobló la mano al Ejecutivo.

Finalmente, como tercera amenaza, ven “la proyección de un quiebre latente en la Coalición por el Cambio y la desafección con el Gobierno”. Por ello la sugerencia que se hace en esta minuta, es dar una señal de unidad y fuerza.

Por otro lado, los presidentes de los partidos de la Concertación, han calificado como “inaceptable y patética” la intervención del Presidente Sebastián Piñera para alinear a los diputados oficialistas detrás del rechazo a la acusación constitucional contra la intendenta del Bío-Bío.