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En medio de los “coqueteos” del comando de Eduardo Frei hacia los equipos de los dos candidatos presidenciales “progresistas” que quedaron en el camino, la Fundación Chile-21, cercana a la Concertación, los invitó a debatir ideas para el futuro.
En tanto, el senador Carlos Ominami, presidente de Chile-21, dijo que un gobierno de derecha sería un “drama”.
La cita fue en un restaurante del Parque Metropolitano en Providencia, hasta donde llegaron los dirigentes políticos que particiarían en la cena del Consejo Nacional de la Fundación Chile-21, entidad que tiene a Ricardo Lagos Escobar y Carlos Ominami como presidentes honorarios.
Aunque el senador Ominami, quien perdió la re-elección en la lista de su hijo en la Quinta Cordillera, aseguró que esta era una reunión de amigos e intelectuales, el tema de la Segunda Vuelta Presidencial y el encantamiento de los díscolos y los pródigos para asegurar el triunfo, rondaba en el ambiente.
Carlos Ominami, reiteró que los votos obtenidos en la elección pasada no son endosables o transferibles a ninguno de los dos candidatos que quedaron en carrera.
En tanto, el senador Guido Girardi, fiel a su estilo, criticó a los dirigentes concertacionistas que no defendieron temas importantes y que eran las banderas de lucha del “progresismo”, como la educación, la salud, la previsión y la propiedad de los servicios básicos, entre otros.
Girardi dijo que estos dirigentes en vez de molestar, debieran trabajar para reformular el progresismo en la Concertación.
El senador electo por la Quinta Región Costa, Ricardo Lagos Weber, reiteró el mensaje: hay que defender la obra de los gobiernos de la Concertación.
Los asistentes a la cena de la Fundación Chile-21 coincidieron en señalar que los puentes se están tendiendo para impedir que la derecha gobierne el país y de paso lograr un quinto Gobierno de la Concertación.
