La mujer de 36 años que fue impactada por una lacrimógena la noche del martes en San Bernardo quedó ciega, según anunció esta tarde el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), el que también confirmó la presentación de una querella en contra de Carabineros al respecto.

En concreto, la acción legal será por el delito de homicidio frustrado, indicaron a través de Twitter.

De acuerdo a lo denunciado por la hermana de Fabiola Campillai, la afectada recibió el golpe de este elemento disuasivo pasadas las 20:00 del martes cuando esperaba locomoción para dirigirse al turno de noche de su trabajo, en la empresa Carozzi, ubicada en el sector de Nos.

A modo de salvar su visión, la mujer se sometió a una cirugía en el Centro Oftalmológico Láser. Sin embargo, al mediodía de este miércoles se supo que la paciente había perdido su ojo izquierdo.

Luego fue trasladada hasta el Instituto de Seguridad del Trabajo, donde donde recibió atención médica para salvar la visión de su ojo derecho, lo que no fue posible.

El hecho es investigado por la Brigada de Derechos Humanos de la Policía de Investigaciones por el delito de lesiones graves gravísimas.

Su caso se suma al de Gustavo Gatica, el joven estudiante de 21 años que, de acuerdo al diagnóstico de la Clínica Santa María, perdió ambos ojos por perdigones disparados por Carabineros durante una manifestación.

Pasadas las 22:30 horas, el INDH entregó una declaración en la cual su director, Sergio Micco, condenó que en menos de un mes dos personas hayan perdido la visión completa “por la violenta acción de la policía, que no se condice con los protocolos que deben seguir”.

“Micco ha sido enfático en señalar que los protocolos no se están aplicando bien, desde la perspectiva que el INDH ha observado más de 161 manifestaciones en la que se emplean perdigones, a pesar de que no haya un riesgo físico e inmediato para el carabinero que hace uso de estos”, indicaron en el escrito.