El gobierno y la oposición se comprometieron este sábado a convivir y respetarse para encontrar un camino “pacífico y electoral” hacia la resolución de la profunda crisis venezolana, sin que los opositores logren aún concretar una vía para sacar al chavismo del poder.

“Nos comprometemos de forma solemne a que nuestras diferencias políticas solo tengan una respuesta en el estricto marco constitucional, un camino democrático, pacífico y electoral”, subrayó una declaración conjunta leída por representantes de ambas partes, tras dos días de conversaciones.

La opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) pide adelantar elecciones o reactivar el referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro -suspendido el 20 de octubre-, pero el acuerdo no menciona esos escenarios.

No obstante, un posterior comunicado de la MUD, leído por uno de sus negociadores, Carlos Ocariz, señaló que la oposición seguirá insistiendo “hasta obtener lo más importante: elecciones nacionales y referendo revocatorio”.

El gobierno y la oposición, cuyas tensiones escalaron tras la suspensión del referendo a tal punto que se temió un estallido de violencia, prometieron en su declaración -titulada “Convivir en paz”- establecer “una relación política respetuosa”.

“No hay política ni convivencia en el odio ni en el insulto, que se erradique el odio, la violencia, la intolerancia, el escarnio y el insulto”, manifestó uno de los negociadores del gobierno, Jorge Rodríguez.

Maduro celebró los pactos. “Va triunfando la paz… Felicitaciones a la Mesa de Diálogo por la paz y la soberanía, que logró buenos acuerdos”, escribió el mandatario en Twitter.

El trabajo continuará en mesas temáticas y la próxima reunión plenaria entre los delegados y los facilitadores, incluidos el Vaticano y la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur), será el 6 de diciembre.

Acuerdos en la mesa

Según otro documento leído por el enviado papal, Claudio María Celli, las partes aceptaron “una hoja de ruta que permita normalizar la relación constitucional entre los poderes del Estado” y atender la crisis.

En lo económico, explicó Celli, los delegados pactaron “priorizar en el corto plazo la adopción de medidas orientadas al abastecimiento de medicamentos y alimentos”, en severa escasez en Venezuela (80% según estimaciones privadas), “sobre la base de promover su producción e importación”.

En lo político, se instó a la “superación de la situación de desacato” de la mayoría opositora del Parlamento, dictada por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) tras la juramentación de tres diputados cuya elección fue suspendida por denuncias de fraude del oficialismo.

Ocariz aseguró que se celebrarán “nuevas elecciones” legislativas en Amazonas (sur), el estado de los tres asambleístas; pero ni el chavismo ni los textos conjuntos hacen mención a ello.

Según Celli, las partes acordaron “trabajar conjuntamente” para designar a dos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE) -acusado por la oposición de servir al gobierno-, cuyo período vence en diciembre próximo.

Oficialismo y oposición también pactaron defender la soberanía nacional y ampliar la mesa de negociación.

A las conversaciones se suman dos gobernadores estadales y se invitará a sectores sociales como trabajadores y empresarios. La patronal Fedecámaras se muestra dispuesta a incorporarse.

Aunque no hay mención del asunto en los documentos publicados, Ocariz aseveró que igualmente se acordó la próxima liberación de políticos y activistas presos, sin precisar un número.

Divisiones

Rodríguez llamó a los sectores que no se han sentado a la mesa a “que se incorporen al diálogo nacional”, considerando que quedó “fortalecido” por los primeros acuerdos.

La MUD, que había amenazado con retirarse de las pláticas si no se consiguen resultados concretos, ratificó que se mantendrá en las conversaciones para dirimir las diferencias en el país “a través del voto popular a corto plazo”, según Ocariz.

Sin embargo, la alianza opositora está dividida tras postergar a principios de noviembre un juicio parlamentario sobre la responsabilidad de Maduro en la crisis y una marcha hacia el palacio presidencial de Miraflores.

Quince partidos opositores que se marginaron del diálogo reiteraron este sábado en que “las condiciones no están dadas” para las pláticas.

En una carta enviada al nuncio Aldo Giordano y a los enviados del Vaticano para el diálogo, Emil Paul Tscherrig y Celli, esos partidos exigieron “activar el referendo revocatorio en el 2016, asumiendo esta herramienta como una alternativa pacífica, democrática, electoral y constitucional”.