El atentado terrorista de Manchester, ejecutado el 22 de mayo pasado durante un concierto de Ariana Grande, no sólo remeció a la comunidad europea completa, sino también significó un punto de inflexión para la industria del espectáculo. Lo anterior se vio reflejado en el concierto que la propia Ariana organizó en la ciudad a días del hecho, titulado One Love Manchester y que reunió a figuras de la talla de Justin Bieber, Katy Perry, Coldplay, Robbie Williams, Miley Cyrus, los Black Eyed y Liam Gallagher.

La premisa de la estadounidense fue curar con música un herida que tuvo al arte como telón de fondo, y para ello acudió a algunas de las figuras musicales más importantes de la música. Uno de los últimos en sumarse al evento fue el siempre polémico Liam Gallagher, ex vocalista de Oasis que acaba de iniciar su carrera solista y que desde un comienzo se mostró dolido por la tragedia de su ciudad natal.

La participación de Liam no fue casual: inmediatamente después del atentado, los mancurianos más célebres enviaron mensajes de apoyo a las víctimas, entre ellas los hermanos Gallagher, quienes protagonizan una disputa pública desde 2009 a raíz de la disolución de Oasis. Mientras Noel publicó la fotografía de un llavero con la sigla “I love Manchester“, Liam optó por ofrecer una presentación en la ciudad, donde dijo: “Tenemos que cuidarnos entre nosotros. Gracias a ustedes por venir, los veré nuevamente”.

Durante la velada solidaria que se celebró en el estadio de críquet Emirates Old Trafford, el momento más emocionante de la jornada fue la interpretación colectiva de “Don’t Look Back in Anger” (No mires atrás con furia), una de las canciones más populares de Oasis que Coldplay cantó junto a Ariana Grande ante los más de 50 mil asistentes.

El hit, incluido en el disco “(What’s the Story) Morning Glory?” de 1996, se convirtió en un himno espontáneo de la tragedia gracias a una situación que ocurrió a horas del hecho.

Sucedió en uno de los homenajes a las víctimas en St Ann’s Square, una plaza que ha aglomerado miles de flores, mensajes y tributos a la víctimas desde el 22 de mayo. En una de las primeras ceremonias que ahí se conmemoró, y tras un sentido minuto de silencio por las víctimas, la ciudadana británica Lydia Bernsmeier-Rullow comenzó a cantar la popular “Don’t look back in anger” a viva voz, en clara mención a la coyuntura descrita.

Comenzó a entonarla sola y casi tímidamente, pero a medida que avanzó se sumaron más asistentes al gesto hasta formar un contenido coro. Un video desde un celular registró el momento, que fue viralizado por redes sociales e incluso comentado por Liam Gallagher.

Aquí la emotiva secuencia del momento exacto en que “Don’t Look Back in Anger” se convirtió en el himno de la tragedia de Manchester.