Trabajadores forestales mostraron su intención de armarse para detener los ataques incendiarios que afectan a la región de La Araucanía y el sur de la región del Bío Bío.
Así también lo indicó un funcionario, quien denunció ser secuestrado y golpeado por los 10 o 12 encapuchados que quemaron 6 maquinarias en la comuna de Los Sauces. Sus desesperadas palabras apuntan principalmente a la presidenta Michelle Bachelet, a quien llamó a ponerse las pilas.
Historia que se sumó a la del domingo en la noche cuando desconocidos atacaron dos camiones y una camioneta de la PDI, enfrentándose luego a tiros con Carabineros en el Fundo el Salto, en Ercilla.
Ambas acciones ocurrieron en menos de 24 horas por grupos que piden, fuertemente armados, la libertad de los presos políticos.
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La fuerza denunciada y la presencia de armas automáticas hicieron que el presidente de la Federación de Sindicatos del Transporte Forestal, Heriberto López, reconociera que estaría dispuesto a usar armas para repeler los continuos ataques que, dijo, reciben sus representados.
Más allá de la idea de portar armas y del reconocimiento de portarlas, lo cierto es que en el sur de la provincia de Arauco ya se trabaja en una mesa, la cual lleva 4 reuniones, para tratar el tema de la violencia.
En tanto, desde la Confederación Nacional de Transportes de Carga, su presidente, Sergio Pérez, llamó al Ejecutivo a hacer cumplir el Estado de Derecho en la llamada zona del conflicto intercultural.
Pérez agregó que está en constante diálogo con sus agremiados de La Araucanía, quienes muchas veces limpian como motosierra los caminos interiores para permitir el paso de la policía, explicó.
