Alan Gross tuvo su primera conferencia prensa luego de su regreso a Estados Unidos tras ser liberado de su cautiverio en Cuba que duró 5 años a partir de ser acusado de espionaje.
El ciudadano estadounidense dedicó gran parte de su relato para agradecer a todas las personas que hicieron posible su liberación, senadores, diplomáticos, miembros de comunidades religiosas, sus amigos, familia y particularmente a su señora con quien está casado desde hace 40 años y pasó los últimos 4 tratando de conseguir el regreso de su marido.
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“La decisión de hacer los arreglos para asegurar mi liberación se tomó en la oficina oval. Al presidente Obama y a toda la gente de ahí muchas gracias”, afirmó Gross destacando el rol del Ejecutivo de su país para poder conseguir su liberación.
Sobre la situación en Cuba y su pueblo Gross dijo que “quiero compartir con ustedes mi más absoluto respeto del pueblo de Cuba. De ningún modo son ellos responsables de la situación a la que yo he sido sometido”.
“Para mi la mayoría de los cubanos son gente bondadosa y con mucho talento y me duele que los traten tan injustamente como consecuencia de las políticas beligerantes de su gobierno”, manifestó.
Por otra parte, sobre los anuncios de mejoramiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos, Alan Gross expresó que “esto es un cambio histórico, yo lo apoyo totalmente”.
Al final de la conferencia Gross reflexionó sobre su experiencia diciendo que “he aprendido que la libertad no viene gratis y que nunca debemos olvidar que los dos pilares son libertad y responsabilidad, me siento bendecido de poder volver a tener esa libertad para volver a una vida constructiva”, concluyó.
