El público que asistió a la primera función de esta obra que llega de Brasil quedó sorprendido. Una mujer en el escenario vacío, sola en un gran piso rectangular blanco… sin nada más, casi sin música ni sonidos además de los producidos por ella misma producto de gritos y sonidos guturales, murmullos y golpes.

El público quedó sorprendido, muchos sin entender esta obra que alude a la locura, a un ataque de epilepsia… en todo caso, una obra perturbadora, incómoda, interpretada de buena manera en 40 minutos muy exigentes y sin tregua (a pesar de ello algunos pestañearon o dormitaron).

La obra Fole, de Michelle Moura, desplaza límites, explora las capacidades expresivas del cuerpo y, con elementos mínimos, se adentra en la humanidad de una persona desequilibrada que agrede y se auto-agrede. Perturbadora

Se presenta hasta hoy sábado, en la sala B1 del GAM, a las 18:00 horas