La coalición de la oposición siria estaba reunida este sábado por la mañana en Estambul para decidir si participa en una eventual conferencia de paz sobre Siria en Ginebra.

La reunión de la principal vitrina política de los adversarios del presidente sirio Bashar al Asad se prolongará “por lo menos hasta el domingo por la noche”, afirmó la coalición, que se ha mostrado reacia a sentarse en la mesa de negociaciones con los representantes del gobierno sirio, en un intento por ganar credibilidad ante los grupos rebeldes que luchan desde hace más de dos años contra las tropas.

Pero los países occidentales y árabes del “grupo de amigos de Siria” y la ONU la presionan para que participe en una eventual conferencia de paz que reuniría a las dos partes para intentar poner fin a la guerra que ha causado más de 120.000 muertos en dos años y medio, según el Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH).

El presidente de la coalición, Ahmad Jarba, puso condiciones muy estrictas para participar en una reunión en Ginebra. Exige sobre todo que desemboque en la dimisión del presidente Asad, algo que Damasco rechaza categóricamente.

Algunos opositores al régimen sirio dicen estar dispuestos a viajar a Ginebra. Pero el principal componente de la coalición, el Consejo Nacional Sirio (CNS) lo descarta completamente, e incluso amenaza con salirse de la coalición si algunos de sus miembros viajan a Ginebra.