Las bajas temperaturas dañaron viñas en Quillón y Yumbel. Los viñateros ya hablan de pérdidas en la producción, mientras que en la Seremi de Agricultura analizan los pasos a seguir.
Un 35% de las viñas de Quillón se vio afectado con las bajas temperaturas que se registraron el pasado miércoles, las que provocaron que se quemaron los dardos de crecimiento.
En el Valle del Itata están preocupados, porque la producción de uva de la próxima temporada sufrirá las consecuencias. Así lo señaló el presidente de los viñateros de Quillón, Juan Carlos Lagos.
Mientras en Quillón no descartan un aumento en el precio de la uva, el seremi de Agricultura, José Rebolledo, señaló que están analizando los pasos a seguir y aseguró que los daños no serían irreversibles.
No sólo en Quillón las bajas temperaturas generaron problemas sino también en Yumbel. Son cerca de 80 los viñateros en la comuna, y la mayoría de ellos tuvo inconvenientes.
El encargado de la Oficina de Desarrollo Económico, Mauricio Ruiz, comentó que entre el 60% y el 80% de la flor de las viñas se quemó producto de las heladas.
El próximo sábado el seremi de Agricultura llegará hasta Quillón para conocer en terreno los daños en la viñas, mientras que en la asociación de la comuna ya hablan de pedir que se declare zona de emergencia climática.
