Dos personas fueron rescatadas vivas y en buen estado de salud el martes, tras permanecer bajo los escombros desde el sábado, cuando un terremoto azotó el noroeste de Irán, según medios de comunicación iraníes.

Ambas se hallaban bajo los escombros de su propia casa cuando los localizaron perros rastreadores, indicaron socorristas a la agencia IRNA y a la televisión pública IRIB.

Según se informó, el estado de salud de estas dos personas era bueno, luego del rescate que tuvo lugar en un pueblo situado al noreste de Tabriz (noroeste de Irán).

Por otra parte, la agencia FARS informó que se había hallado un número indeterminado de cadáveres este martes, incluyendo el de una mujer de 27 años en este pueblo.

El ministerio del Interior había indicado el domingo que “las operaciones de rescate han finalizado”. “Ya no hay nadie entre los escombros”, agregó Hasan Ghadami, responsable de la célula de crisis del ministerio.

“Numerosas víctimas perdieron la vida en los primeros momentos del sismo porque muchas de las casas de la región son de tierra y, con el peso de los techos, las víctimas no tuvieron ninguna oportunidad”, había explicado por otra parte Ghadami.

Algunos dirigentes iraníes criticaron la reacción gubernamental tras el terremoto, mientras que otros elogiaron la rapidez con que actuaron los socorristas.

El doble terremoto que azotó el sábado en un intervalo de pocos minutos el noroeste de Irán dejó 306 muertos, en su gran mayoría mujeres y niños, y más de 3.000 heridos, según una nueva estimación presentada el lunes por la ministra de Salud.

Los dos sismos de magnitud 6,3 y 6,4, según el Instituto de Geología norteamericano, golpearon con pocos minutos de intervalo una región montañosa de la provincia de Azerbaiyán oriental, situada en el noroeste de Irán.

Este martes, otro terremoto de magnitud 5,3 golpeó la región de Tabriz, anunció el centro sismológico de la Universidad de Teherán. Por el momento no se tiene constancia de víctimas.

El gobierno decidió proporcionar una rápida ayuda a los habitantes de la región para reconstruir sus casas. Según una fuente oficial, “más de 10.000 casas sufrieron daños en la región”.

Irán está situado sobre importantes fallas geológicas y ha sufrido sismos devastadores a lo largo de su historia. El más importante de los últimos años, en diciembre de 2003, mató a 31.000 personas en Bam (sur), es decir a una cuarta parte de la población de la ciudad.