Nicolás Almagro es la última baza de la ‘Armada’ española en individuales masculinos del tenis olímpico, tras la sorpresiva eliminación de David Ferrer, este miércoles en Wimbledon, y la de Feliciano López.

Almagro, undécimo cabeza de serie de la competición, venció por 7-5 y 6-3 al belga Steve Darcis en 81 minutos de partido y disputará su encuentro de cuartos ante el ganador entre el crédito y gran esperanza local, el escocés Andy Murray (N.3), quien sufrió para imponerse al chipriota Marcos Baghdatis en el Court Central de la ‘Catedral’ del tenis.

“Será algo magnífico jugar con Murray en la Central, puesto que nunca jugué allí (…) Aunque, realmente no importa con quién juegue, sólo quiero disfrutar de estos cuartos de final”, destacó el tenista español, ganador la temporada pasada en Costa do Sauipe, Buenos Aires y Niza, que arrastra molestias en un hombro.

“Estoy mal desde el otoño (boreal) y sentí un poco de dolor (en el hombro), pero no parece ser un problema serio, pero estoy hasta el c… de Voltarén”, explicó.

El murciano quebró el servicio del belga de entrada, pero éste le retrucó en el séptimo juego, pero el primero volvió a lograr la inflexión en el duodécimo juego para cerrar con 7-5 en 51 minutos una dura primera manga.

En la segunda, ‘Nico’ logró el quiebre para 4-2 para cerrar sin sobresaltos con marcador de 6-3 y asegurarse una plaza en la antepenúltima ronda de la prueba.

Ferrer, cuarto favorito, cayó 6-0, 3-6 y 6-4 ante el japonés Kei Nishikori (N.15), en un duelo que fue suspendido por falta de luz y trasladado al Court Central.

Por completo abatido al quedar fuera de un evento que se disputa “cada cuatro años”, el perdedor destacó: “él ha estado mejor que yo, para qué engañarnos, fue más valiente (…) Intenté rehacerme, pero él jugó mejor”.

Sorpresivamente, el nipón, de 22 años, una de las revelaciones del circuito en los últimos tiempos, se llevó el primer set en blanco (6-0), al romper el saque del alicantino, buque insignia de la ‘Armada’ por la baja de ‘Rafa’ Nadal, en tres ocasiones.

En el segundo set, el español tuvo que mostrar todo su oficio para poder remontarlo, devolverle un quiebre de servicio a su rival, para volver a hacerlo y cerrarlo con marcador de 6-3, cuando llevaban casi una hora de intercambios.

La tercera manga fue muy pareja, y Ferrer, de 30 años sufrió para mantener su servicio en el octavo juego (4-4), y cuando estaba Nishikori 5-4 arriba y el primero con su saque se decidió finalizarlo en la cancha principal, que cuenta con luz artificial.

Fue sólo cosa de un minuto, porque el japonés rompió el servicio al español inmediatamente para cerrar en 6-4 tras 1 hora y 56 minutos de partido.

López, por su parte, cayó por 7-6 (7/5) y 6-4 frente al francés Jo-Wilfried Tsonga (N.5), quien la víspera protagonizó el encuentro más largo (3h y 56m) y con más games disputados (66) a tres sets en la historia de los Juegos, en el que derrotó por 6-3, 3-6 y 25-23 al canadiense Milos Raonic, tras un mano a mano muy cerrado en el primer set, logró imponerse en la ‘muerte súbita’ por 7-6 (7/5).

A pesar de acusar el cansancio, el jugador de Le Mans tuvo arresto para quebrar el saque al toledano en el séptimo game, el de las grandes inflexiones, por lo que cerraría con resultado de 6-4 tras 69 minutos de partido.

López alabó el juego de su rival e hizo una autocrítica. “Él ha jugado muy bien, sobre todo en el tie-break, con un muy buen passing (…) El segundo set fue culpa mía, podría haberlo llevado también a tie-break, pero él jugó muy bien a pesar de que venía de jugar un largo partido”, confesó el español, quien también se manifestó cansado y cifra sus esperanzas olímpicas en el dobles.

Tras quedarse sin representantes femeninas en singles y dobles, el tenis español recibió este miércoles un balde de agua fría al no poder alinear en dobles mixtos, la novedad de estos Juegos Olímpicos, al dúo de María José Martínez y Marcel Granollers por un problema reglamentario vinculado al ránking.