Estados Unidos sigue percibiendo una “explosión” del tránsito de la droga por Venezuela y lamenta que la colaboración en su lucha antidrogas sea limitada, dijo el martes el secretario de Estado adjunto para Narcóticos y Seguridad, William Brownfield.

El funcionario calificó la relación con Venezuela como “complicada en términos de colaboración en cuestiones antidrogas” y también sostuvo que la muerte del máximo jefe de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), alias ‘Alfonso Cano’ facilitará el combate a las drogas.

Con Venezuela “admito que la colaboración en este momento es limitada, admito que en los últimos cinco, seis años hemos visto una explosión, repito, explosión de tránsito de droga ilícita por Venezuela hacia el mercado exterior”, dijo Brownfield en una mesa redonda con periodistas en la sede del Comando Sur en Miami, sureste de Estados Unidos.

“Creo que la razón o una de las razones es la falta de colaboración de las instituciones de Venezuela con el resto de la comunidad internacional, para atacar y controlar el tráfico de la droga ilícita”, agregó el alto funcionario.

Para Brownfield “hay algunas excepciones y quiero reconocerlas: cuando el gobierno venezolano ha decidido colaborar en algunos casos específicos, ha decidido expulsar a algunas personas a otros países para juicios, ha ofrecido información o inteligencia de algunos movimientos”.

“Ha sido más excepción en vez de la regla”, dijo.

“Pero creo yo que mi responsabilidad es buscar oportunidades, es repetir y reiterar que estamos dispuestos, preparados, listos a colaborar con Venezuela y su gobierno para controlar el movimiento de la droga ilícita por Venezuela hacia el exterior y el movimiento financiero (…). La oferta es permanente”, apuntó el funcionario.

Venezuela y Estados Unidos no tienen embajadores desde finales de 2010. Caracas ha defendido reiteradas veces la “política clara, seria y transparente” del gobierno en su lucha contra el narcotráfico.

Sobre la muerte de Alfonso Cano, cuyo verdadero nombre era Guillermo León Sáenz, abatido en un ataque del Ejército colombiano el pasado 4 de noviembre, Brownfield aseguró que su trabajo “va a ser más fácil en el futuro”.

“Sobre los eventos que sacaron a ‘Alfonso Cano’ de su lugar para ponerlo en el paraíso revolucionario en el cielo, agrego mi voz a la voz de 46 millones de ciudadanos colombianos que nadie quiere celebrar la muerte de otro ser humano, pero si hay alguien que mereció esa conclusión de su vida, probablemente es él”, dijo en un encuentro donde habló sobre todo en español.

Para el funcionario estadounidense “es imposible negar que en este momento las FARC y el Talibán en Afganistán, son dos de las organizaciones narcotraficantes más grandes y más importantes en todo el mundo”.