Cuatro integrantes de una familia, incluido un niño de dos años, fueron asesinados por un comando armando que ingresó la madrugada del martes a la humilde vivienda donde dormían en la ciudad de Monterrey, norte de México, informó la fiscalía del estado de Nuevo León.

Otros dos miembros de la familia, una mujer de 50 años y una niña de cinco, están gravemente heridas, dijo a la AFP un vocero de la fiscalía de Nuevo León, cuya capital es Monterrey.

Ocho hombres encapuchados y armados con rifles tipo AK-47 y R-15 dispararon durante unos tres minutos unas diez ráfagas dentro de la vivienda, señaló la fuente.

En el ataque murieron un hombre de 44 años junto con su hermana de 39, la hija de esta de 18 años y su nieto de dos años, dijo el funcionario.

En la vivienda, ubicada en el sur de Monterrey, los sicarios dejaron un mensaje del narcotráfico, según el funcionario que requirió el anonimato.

Los agresores, que también golpearon con sus armas a un joven de 12 años, se retiraron caminando para huir en tres automóviles estacionados a dos cuadras de la vivienda, según dijeron testigos a la fiscalía.

El estado de Nuevo León, y en especial su capital, se encuentran inmersos en una ola de violencia generada por los cárteles de la droga, sobre todo por el grupo Los Zetas, que ha propagado el terror con ejecuciones, extorsiones y secuestros.

La violencia atribuida a la lucha entre los cárteles del narcotráfico en México y derivada de la ofensiva militar ordenada por el presidente Felipe Calderón contra el narcotráfico ha dejado desde diciembre de 2006 más de 41.000 muertos.